Entrevista a Pilar Garrido .......
ENTREVISTA A PILAR GARRIDO, PRESIDENTA DE LA FEDERACIÓN DE ASOCIACIONES CIENTÍFICO-MÉDICAS ESPAÑOLAS (FACME)
La Federación de Asociaciones Científico-Médicas Españolas (FACME) es una corporación sin ánimo de lucro que agrupa a cuarenta y tres sociedades de ámbito estatal y que representa a unos cien mil médicos especialistas en España. El papel de esta organización, así como el de las sociedades científicas que aglutina, ha resultado clave durante la pandemia: desde el asesoramiento para la adopción de medidas de gestión hasta la divulgación científica sobre la covid-19. Hemos hablado con su presidenta, Pilar Garrido. ¿Cómo ha respondido FACME a la pandemia de la COVID-19? Durante 2020, centramos casi todos los esfuerzos en distintos aspectos de la pandemia; por ejemplo, realizamos un importante trabajo de recopilación de las distintas iniciativas de las sociedades científicas relativas a la divulgación de medidas para la ciudadanía o de apoyo a las Administraciones central y autonómicas. También creamos un consejo asesor de covid-19, con hasta once grupos de trabajo que incluyen atención clínica a pacientes, mantenimiento de la asistencia a enfermos que no sufren covid, pruebas de laboratorio, vacunación, etcétera.
Este año entendemos que la atención a pacientes no covid será también muy importante para nosotros. Como oncóloga, estoy preocupada por el impacto en personas con cáncer o el retraso en los diagnósticos, aunque hay muchas otras áreas que también nos generan preocupación.
Los conocimientos acerca del virus se fueron acumulando cada día, ¿cómo pueden gestionar las sociedades científicas todos esos avances?
Con determinación, motivados por la responsabilidad ante nuestros pacientes y con el apoyo y la colaboración mutua entre profesionales.
Durante toda esta crisis, se ha puesto también encima de la mesa la necesidad de que se cuente con las sociedades científicas para la toma de decisiones… ¿Se ha avanzado en este sentido?
Sí que ha habido avances. Nos hemos reunido con el ministro de Sanidad, con la secretaria de Estado de Sanidad, con distintos consejeros de este ámbito en distintas comunidades autónomas, con los portavoces de sanidad de todos los partidos políticos, etcétera. Todos ellos han sido muy receptivos a nuestras propuestas y han agradecido los documentos que hemos elaborado y puesto a su disposición, por lo que confiamos en que esta relación se vaya fortaleciendo y las sociedades científicas puedan contribuir en mayor medida en el futuro. ¿Cuáles son las lecciones aprendidas de esta crisis?
La situación generada por la pandemia de covid-19 ha planteado importantes retos para nuestro sistema nacional de salud, poniendo a prueba su capacidad de adaptación y de rápida respuesta.
Además, esta situación ha puesto de manifiesto, de manera inequívoca, la necesidad de fundamentar las decisiones sanitarias en la mejor evidencia científica disponible. En situaciones excepcionales como la actual es especialmente crítico contar con herramientas de gobernanza que permitan incorporar con agilidad la experiencia de los profesionales sanitarios y facilitar los recursos y procesos necesarios para revisar y generar dicha evidencia cuando no está disponible. Luego, hay que ponerla cuanto antes a disposición del conjunto del sistema sanitario, a los decisores, planificadores, gestores y profesionales sanitarios.
¿Está el sistema preparado para hacer frente a otras crisis similares?
Las aportaciones y los sistemas de gobernanza para la toma de decisiones basadas en criterios científico-técnicos durante la pandemia han sido claramente mejorables. Sin duda, este episodio debería suponer una oportunidad para mejorar la asistencia y el funcionamiento del sistema de salud, y, de manera decidida, consolidar y acelerar los cambios que la emergencia ha hecho aflorar como claves para una mejor respuesta. Si no llevamos a cabo esa transformación, no estaremos preparados.
“COMO ONCÓLOGA, ESTOY PREOCUPADA POR EL IMPACTO EN LOS ENFERMOS DE CÁNCER”