Calefacción del hogar
Se han barajado muchos usos del hidrógeno, pero no está garantizado que se materialicen todos . Uno es descarbonizar la calefacción doméstica. Sus defensores argumentan que muchos países podrían reutilizar las redes de tuberías de gas existentes para transportar hidrógeno y cambiar las calderas de gas natural por otras capaces de quemar hidrógeno.
Leeds, en el Reino Unido, ha sido considerado como uno de los primeros candidatos para cambiar por completo al hidrógeno en lugar del gas natural para calentar y cocinar. Un informe de 2016 de la red de energía local encontró la idea como “técnicamente posible y económicamente viable”. En noviembre, el Gobierno de aquel país dijo que apoyaría una prueba de calentamiento de hidrógeno a escala de aldea para 2025.
Los escépticos, sin embargo, apuntan que sería más eficiente usar electricidad renovable directamente con bombas de calor para calentar hogares, en lugar de perder energía convirtiéndola en hidrógeno primero. Un informe reciente de Jan Rosenow y un equipo del Centro de Investigación de Energía del Reino Unido concluyó que existe tanta incertidumbre sobre el papel del hidrógeno en la descarbonización del calor que otras opciones deberían ser la prioridad en la próxima década. Estos incluyen redes que conducen calor a muchos hogares desde una gran fuente central, como una planta industrial, mejoras de eficiencia energética y bombas de calor.