PIONEROS
LOS PRIMEROS VIAJEROS ESPACIALES FUERON ANIMALES. ELLOS ABRIERON CAMINO A LOS ASTRONAUTAS QUE SE HARÍAN FAMOSOS… Y A HÉROES MENOS CONOCIDOS.
IZQUIERDA: John Glenn llevó este traje espacial, con 27 cremalleras para garantizar un ajuste ceñido, cuando orbitó la Tierra el 20 de febrero de 1962.
Yuri Gagarin, Alan Shepard, John Glenn y Neil Armstrong –la primera tanda de viajeros espaciales– eran astronautas con entrenamiento militar que, por sus aptitudes para participar en misiones de riesgo, fueron «elegidos para la gloria».
Los primeros viajes espaciales, sin embargo, no fueron terreno netamente masculino.… ni tampoco humano. Moscas, monos, ratones, perros, conejos y ratas llegaron al espacio antes que nosotros.
Más de tres años antes de que Gagarin se convirtiese en el primer ser humano en llegar al espacio con su viaje de abril de 1961 alrededor de la Tierra, los soviéticos enviaron una (tristemente) famosa perra callejera. Laika fue el primer animal que orbitó la Tierra, pero murió durante el vuelo. Estados Unidos lanzó al espacio un chimpancé llamado Ham. Por fortuna sobrevivió, despejando así el camino para que en mayo de 1961 Shepard se convirtiese en el primer estadounidense que llegaba al espacio.
Pese a la discriminación imperante, las mujeres también fueron pioneras. Algunas, como la matemática Katherine Johnson (quien calculó a mano los detalles de la trayectoria del vuelo que haría de Glenn el primer estadounidense en orbitar alrededor de la Tierra en 1962) trabajaron fuera de los focos. Valentina Tereshkova, cosmonauta pionera, se convirtió en 1963 en la primera mujer puesta en órbita. Hubo que esperar 20 años para que Sally Ride viajase en el transbordador espacial Challenger y fuese la primera estadounidense que llegaba al espacio.