GRANDES MAESTROS
El creador escocés fue un visionario. A los 150 años de su nacimiento, sus proyectos arquitectónicos y el mobiliario que diseñó para ellos son míticos.
Charles Mackintosh. Conocido por su famosa silla, repasamos la obra de este escocés visionario.
La ciudad de Glasgow celebra este año el aniversario de uno de sus vecinos más ilustres: Charles Rennie Mackintosh (1868-1928). Ya desde el comienzo con el colectivo de creadores The Four, y en adelante junto a uno de sus miembros, Margaret Macdonald, con la que se casa en 1900, sus trabajos despuntan por lo novedoso de los planteamientos. Con un estilo singular que mezcla con maestría influencias del Arts & Crafts, el Art Noveau, la estética japonesa o la tradición autóctona escocesa, Mackintosh contribuye a una nueva arquitectura con edificios de apariencia clásica, pero audaces e innovadores en su uso de elementos simbólicos y en la combinación de modernidad y tradición. Obras emblemáticas son la Hill House, la Glasgow School of Art o los salones de té que proyectó para Catherine Cranston.
COMPLEMENTARIOS. El escocés concebía la arquitectura y el diseño como un todo encaminado a conseguir la armonía visual. Ideaba los muebles, por tanto, para encajar en un determinado entorno. Son diseños estilizados, inspirados en la naturaleza, entre los que destacan sus famosas sillas de respaldos altos. En 1914 se establecerá en Londres, donde se dedicará a diseñar tejidos con delicados estampados florales. glasgowmackintosh.com