COMUNIÓN CON EL PAISAJE

Cubos unidos por pasillos acristalados dan forma a esta casa en el Empordà, decorada por Susanna Cots. Su arquitectura, obra de Damián Ribas, diluye los límites entre lo natural y lo construido, mimetizándose con el bosque circundante.

Una casa que reproduzca la sensación de estar caminando por el bosque es lo que la interiorista Susanna Cots ha logrado con su último proyecto en el Empordà. Bautizada como Oxygen, la vivienda, de la promotora Gestió7 y con planteamiento del arquitecto Damián Ribas, es toda una oda a la naturaleza, articulada por una serie de cubos que se suceden unos a otros conectados por pasillos acristalados y patios que integran el entorno en el interior. De diseño elegante y colores neutros y naturales, en la construcción se ha separado la zona de día y de noche en dos alas independientes. En un extremo, y ocupando un primer pabellón, se encuentra la cocina, un espacio de líneas puras y limpias donde el techo abuhardillado genera movimiento. La estancia conecta con el resto de la casa mediante unas cristaleras negras que aportan tanta privacidad como complicidad entre los espacios.

Con espectaculares vistas, la casa se mezcla con un entorno boscoso que hace suyo y en el que quiere pasar desapercibida. Inspiradas en la arquitectura local, sus fachadas combinan materiales naturales en tonos tierra y terracota con grandes superficies acristaladas.

La sala de estar está equipada con sofás de Dareels –decorados con cojines de Teixidors– y mesa de centro de Decosingular.En la esquina, butaca de Crearte Collections. Bajo el cuadro, procedente de la galería L'Arcada, banco de Carl Hansen & Son.En la otra página, el comedor, iluminado por una lámpara de Artemide, con mesa de 555 Project y sillas de Dareels. El cuadro es de L'Arcada.