Puerto del Pico
pasos históricos de la sierra de Gredos,
uno de los
A partir del siglo XV estuvo controlada por la y se convirtió en una ruta esencial para los comerciantes y arrieros que movían carretas de madera, sal, telas, vino, aceite, cereales y otros productos entre las dos mesetas. Los pueblos de las
han estado encargados del mantenimiento de la calzada hasta la aparición de las carreteras actuales. El valor histórico de la vieja vía romana, convertida después en la aumenta por el buen estado de conservación y la estética arquitectónica del trazado en un bello paisaje de montaña. La ruta por
y entra directamente en el trazado original hacia el puerto del Pico, escoltado por las torres de granito del El tramo inferior de la vía aparece bastante deteriorado y mejora según aumenta la altitud, también aparecen edificios que fueron antiguas ventas para los viajeros y las primeras vistas del espléndido valle del Tiétar. La calzada adquiere toda su magnitud y grandeza al cruzar la carretera del puerto, cuando se aprecia realmente la calidad constructiva de los ingenieros romanos para salvar los instalando uno de ellos mantiene la
El solar romano de la calzada primitiva tenía primero una capa de cimientos, después un firme de piedras grandes apisonado con grava y encima el pavimento de losas de granito,
En las últimas horquillas aparecen también unos hitos de piedra, como del empedrado, que sirven para marcar el camino cuando está cubierto de nieve en los meses de invierno. La ruta a pie es subida y bajada por el mismo camino, en bicicleta es recomendable subir al puerto del Pico por la carretera y descender la calzada con mucha precaución, destreza y buena técnica, poniendo a prueba las pastillas de los frenos y las amortiguaciones de la bicicleta de montaña. con riesgo de llantear, además de los tramos rotos donde están levantadas las piedras, que atraviesan el firme y no permiten ningún despiste.