LA CAJA NEGRA. LOS PERROS VUELAN BAJO
Alek Popov Automática, traducción de Viktoria Leftérova y Enrique Maldonado, 320 pp., 20 €
Estamos ante un columnista y guionista búlgaro (Sofía, 1966) con una labor literaria preñada de sátira corrosiva. Es el caso que se ofrece ahora, en que Popov cuestiona el capitalismo moderno desde un prisma familiar, pues indaga en crisis entre varias personas, abordando la dicotomía entre el triunfador que decidió expatriarse y el perdedor que se mantuvo en casa. Ello le lleva a realizar un enfrentamiento entre el Este y el Oeste, o lo que es lo mismo, entre Wall Street y el comunismo. La novela cuenta el modo en que en 1990 una caja negra llega a Sofía desde Estados Unidos, en la cual están las cenizas de un catedrático fallecido en circunstancias extrañas durante una estancia como profesor visitante en Filadelfia. Quince años después, sus dos hijos coinciden en Nueva York (uno vive a lo grande en Manhattan y el otro pasea perros) y tal reencuentro desencadena un torbellino de acontecimientos delirantes.