Barómetro la Posventa Cataluña
Enfrentamos datos de distribuidores, talleres y vehículos para tomar el pulso a la posventa catalana en un momento en el que la distribución acelera su proceso de concentración. Las medidas anticontaminación amenazan con poner en riesgo a los talleres del
El enorme peso demográfico de la provincia de Barcelona y la cercanía de países como Francia o Italia, ofrecen importantes oportunidades de desarrollo para los fabricantes y distribuidores de recambios. Y es que estas compañías pueden sacar provecho a un mercado local muy potente desde el punto de vista de la posventa y, al mismo tiem- po, aprovechar su situación como puerta de Europa para explotar una vía que no para de crecer año tras año: la exportación. A eso tenemos que sumar un aliado de primer nivel, como es el puerto de Barcelona, una vía estratégica de negocio que permite a estas compañías introducir en nuestro país productos de todo el mundo y, lo que es más importante,
atacar nuevos mercados. Un buen ejemplo de las posibilidades que ofrece esta vía lo hemos vivido este mismo mes de abril, cuando siete empresas catalanas de automoción –Zanini, Doga, GPO, Campus Motor Anoia, AMES, MMM e Infun Group– han viajado a China de la mano del Clúster de la Indústria d’Automoció de Catalunya (CIAC) para buscar negocio en el gigante asiático.
OPORTUNIDADES GRACIAS
A LA MOTO Y EL SUV
Al margen de las posibilidades que ofrece el mercado exterior, la posventa catalana cuenta con argumentos más que suficientes para garantizar una alta rotación en el taller. No en vano, el parque de turismos de la región supera los 3,3 millones de unidades, alrededor del 15% del total del país, de los que el 71% –más de 2,3 millones– están registrados en la provincia de Barcelona. No es de extrañar, por tanto, la enorme cantidad de actores que operan en el entorno de la capital barcelonesa, con compañías que realizan hasta cuatro y cinco repartos al día. Uno de los aspectos más interesantes para la posventa es el interés del conductor catalán por los vehículos tipo SUV. Según el distribuidor de neumáticos Grupo Andrés, uno de cada cinco todocaminos matriculados en España rueda por las carreteras catalanas, una cifra nada despreciable que las empresas pueden aprovechar para ganar enteros en esta comunidad. Según los datos de Aniacam y Anfac, en 2015 se matricularon en España alrededor de 220.000 todocaminos y todoterrenos, con el Nissan Qashqai como líder de ventas gracias a sus 23.832 operaciones. Por detrás, el Top 10 lo cierran el Renault Captur, el Peugeot 2008, el Kia Sportage, el Volkswagen Tiguan, el Opel Mokka, el Nissan Juke, el Dacia Duster, el Hyundai ix35 y el Mercedes GLA.
Más allá de las posibilidades que ofrecen los SUV al mercado de la posventa, el segmento de las dos ruedas es otro de los filones más interesantes en Cataluña. Y es que la región cuenta con más de 720.000 motocicletas registradas, nada más y nada menos que el 24,3% del parque español. Barcelona, con algo más de 550.000 motos, es la provincia que más oportunidades ofrece dentro de este segmento, por lo que los talleres y recambistas no pueden obviar el potencial de este mercado para incrementar la rentabilidad de sus negocios.
Si sumamos todos los vehículos registrados en Cataluña –turismos, todoterrenos, motocicletas, camiones, autobuses, tractores y vehículos industriales y especiales–, el parque roza los cinco millones de unidades, el 16,1% de todos los contolados por la Dirección General de Tráfico.
216 TIENDAS AGRUPADAS
La relevancia de la posventa catalana no es ajena a los grupos de distribución de recambios, muchos de
los cuales tienen su sede en esta región. Ése es el caso de AD Parts, Cecauto o Serca, tres de los grupos con mayor peso dentro de la distribución española. En la actualidad, 215 puntos de venta operan en esta región bajo la bandera de algún grupo, aproximadamente el 12% de las casi 1.900 tiendas agrupadas que existen en España. Cecauto, con 50 establecimientos, lidera este ranking, seguido muy de cerca por AD Parts (47). Tras ellos encontramos otros tres grupos con una fuerte presencia. Hablamos de Groupauto Unión Ibérica (38 puntos de venta), Serca (34) y CGA (28). Estas cinco empresas dominan la distribución agrupada en Cataluña con 197 establecimientos, el 91% del total. A pesar de ello, la distribución no agrupada continúa ostentando una buena cuota en la posventa catalana de automoción. De los 1.000 puntos de venta de mayor facturación de nuestro país –incluyendo mayoristas y minoristas–, 115 están en esta comunidad. En este apartado debemos hablar, no sólo de la presencia de los principales recambistas independientes del país, como Recalvi, Filtros Cartés, Impormovil o Grupo Silvestre, sino también de empresas de gran prestigio a nivel nacional con origen en Cataluña, como Grovisa, Estanfi Automoción, Exclusivas BCN, Central de Recambio Original (CRO) o NER-TOR.
EL NEUMÁTICO TAMBIÉN APUESTA POR CATALUÑA
El potencial de la posventa catalana tampoco pasa inadvertido para los distribuidores especializados en neumáticos. En el último año hemos visto cómo dos de las empresas más importantes de este negocio, Tiresur y Grupo Andrés, han potenciado su presencia en la región con la apertura de nuevos almacenes. En el caso de Tiresur, la compañía andaluza
estrenó en la pasada primavera unas nuevas instalaciones que cuentan con una superficie de más de 3.000 metros cuadrados y una capacidad de almacenamiento de más de 45.000 neumáticos. Desde aquí salen cuatro repartos diarios, con un servicio de entregas optimizado para mejorar la efectividad en esta área geográfica.
Grupo Andrés, por su parte, ha potenciado su presencia en Cataluña con la inauguración, en el mes de febrero, de un centro de distribución en la localidad de Polinyà, a 30 kilómetros de Barcelona, un enclave estratégico para atender con mayor rapidez la demanda de neumáticos tanto de Cataluña como de Baleares. Las nuevas instalaciones, de 3.000 metros cuadrados, pretende distribuir alrededor de 50.000 neumáticos en la región a finales de 2016 y alcanzar las 300.000 unidades a medio plazo. Esta cifra supondría más del 10% del volumen del mercado de reposición catalán. La ubicación en Polinyà no es gratuita, ya que la capital barcelonesa y su área de influencia aglutinan más del 70% del parque automovilístico de la región. Un parque que supera los tres millones de turismos y vehículos 4x4/SUV y que se acerca a los cinco millones si sumamos motocicletas, vehículos pesados, maquinaria agrí-
cola y otros vehículos. Los talleres especializados de Barcelona capital cuentan con dos repartos diarios.
LOS TALLERES DE BARCELONA, EN PIE DE GUERRA
En Cataluña operan de manera legal más de 7.700 talleres, de los que algo más de 5.000 están en Barcelona. A pesar del tamaño del parque, la rentabilidad es uno de los caballos de batalla de estos establecimientos, ya que cada centro apenas se reparte 426 turismos, muy por debajo de la media española (511) y a años luz de otros países de nuestro entorno. En Barcelona la situación es ligeramente mejor, con 467 turismos por taller, pero aun así tenemos que hablar de una elevada concentración. Además, las políticas anticontaminación que estudia la Administración catalana podría perjudicar, aún más, la viabilidad de estos negocios, sobre todo en el área metropolitana de Barcelona. El Consell de Municipis Metropolitans per a la Lluita contra la Contaminació Atmosfèrica, creado para buscar soluciones a los problemas de contaminación, ha propuesto una medida que ha puesto en pie de guerra a los talleres de esta área: prohibir la circulación de los vehículos más contaminantes a partir de 2018, con especial atención a los diésel de más de 20 años. Además, otros vehículos podrían tener un acceso limitado a esta zona, compuesta por 36 municipios. El Gremio Provincial de Talleres de Reparación de Automóviles de Barcelona no ha dudado en salir en defensa de estos talleres (1.755) con un duro comunicado en el que afirma que “sólo se tiene en cuenta al fabricante, no participando la posventa”. La entidad se pregunta si “lo que se pretende es dejar la posventa sólo en manos de la red de la marca”, una decisión en cuyo caso, “sería obligado analizar los perjuicios a la libre competencia”. El Gremio finaliza su escrito dejando una pregunta en el aire: “¿Cómo atenderán estos establecimientos a sus clientes si se les impide circular para acudir a su taller?”.