22 - Revista Traveling
Ahmedabad también es un catálogo de edificios modernos singulares.
De las entrañas de la tierra hasta el cielo
Los guyaratíes se vanaglorian de sus principales dignidades del siglo XX: Gandhi, su guía espiritual, y Patel, el líder que unificó la inmensa y diversa India. Al primero le llevan en el corazón y a Patel le han erigido, a 200 km al sureste de Ahmedabad, en 2018, la Estatua de la Unidad, una efigie de 182 m (la más alta del mundo) con una estructura de acero y hormigón, recubierta por una “piel” de bronce, que reposa sobre un pedestal de 58 m. En su interior cobija un magnífico museo en torno a su vida y a la unificación, y en su pecho, un mirador. Durante las obras trajeron tierra de todos los estados de India para simbolizar esa unidad. La imagen del coloso en la distancia, en el horizonte entre la neblina, parece jugar con las montañas como si fueran castillos de arena.
También profundizan en la tierra. Al norte de la ciudad hay dos templos muy singulares: Adalaj Stepwell (1499 d.c.), en Adalaj, y Rani-kiVav (S.XI), en Patan. Ambos son imperceptibles, invisibles, parecen no existir hasta estar justo encima de ellos porque son subterráneos. En una increíble obra fueron excavados para disponer del agua que buscaban mediante los pozos más elegantes y trabajados del mundo. El de Patan profundiza hasta 27 m con una estructura pétrea de 7 plantas labrada y decorada con profusión hasta el más pequeño detalle. El de Adalaj, similar y algo menor, cuenta con doble pozo.
Esto es solamente una parte de lo que atesora Gujarat, el único lugar del mundo, aparte de África, con leones en libertad.