Runner's World (Spain)

EL HOMBRE QUE TODO LO SABE

ÓSCAR FERNÁNDEZ ES LA PERSONA QUE SE ESCONDE DETRÁS DE @GABYANDERS­ENGZ, UNA DE LAS CUENTAS DE TWITTER MÁS IMPORTANTE­S DEL ATLETISMO ESPAÑOL. TE CONTAMOS SU HISTORIA.

- POR NACHO BARRANCO

DICEN QUE LA COSTA GALLEGA tiene tantos recovecos que resulta imposible controlarl­a. Por eso allí se han fraguado historias de contraband­istas, piratas y marineros que dejaron parte de su vida en ella. En sus pequeñas playas y tremendos acantilado­s. En su bravura descomunal. Algo así ocurre en la mente de Óscar Fernández. Su cabeza, la costa gallega. Su material de contraband­o, el atletismo. Lo bueno es que su conocimien­to no es un producto ilegal y nos deja disfrutar de él a través de su cuenta de Twitter. Porque Óscar Fernández es @gabyanders­engz.

“Soy como Windows, empiezo a abrir ventanas y no paro…” avisa Óscar después de haber monopoliza­do los primeros 20 minutos de llamada telefónica hablando de uno de los personajes que más poso le han dejado en este mundo, el suyo, del atletismo. Su nombre, Juan Manuel Abad Manteca. “Yo soy del 1969, como Fermín Cacho, pero él no era el bueno, ese era Manteca, que también era de Soria. Te puedo contar 20.000 historias hilarantes de este tipo. Desde los 8 días de concentrac­ión que estuvo sin ducharse hasta una cama llena de revistas pornográfi­cas para intentar li-

“En el mundial de Helsinki 1983 no me dormí pensando si González había pasado de ronda o no. Esa noche me hice de Abascal”

garse a la mujer que limpiaba nuestra habitación del hotel”. Historias que Óscar sigue almacenand­o en su memoria y que dan para escribir un libro. Y si no es un libro, un buen hilo en Twitter.

“Cuando era atleta practiqué fondo principalm­ente. Fui campeón de España junior de 3.000 metros y 20 kilómetros en ruta, de 10.000 en promesa,… pero destacaba porque me metía mucha caña entrenando. Llegué a hacer 1:03:58 en medio maratón pero luego ya tuve muchos problemas con el tendón de Aquiles”, explica sin darse demasiada importanci­a, casi queriendo pasar rápido de página y hablar de atletismo, su gran pasión. La nuestra.

Y el primer nombre que surge no es otro que el de Gaby Andersen, la mujer que da nombre a su nick en Twitter. “Los Juegos Olímpicos de 1984 son los primeros que recuerdo. Tenía 15 años y esa imagen de Gaby Andersen me impactó muchísimo. Es verdad que le tenían que haber retirado”. Esos Juegos le marcaron, pero el primer disgusto se lo había llevado un año antes.

Se disputaba en 1983 el primer Campeonato del Mundo de la historia. En Helsinki. Era 12 de agosto y Televisión Española emitía las series de los 1.500 metros, en las que José Manuel Abascal y José Luis González estaban presentes. Abascal pasó por puestos a semifinale­s pero González no y antes de que la realizació­n emitiera los resultados para ver si el toledano también pasaba de ronda la rentransmi­sión se detuvo. “Yo aquella noche no dormí pensando si González había pasado o no. Claro, antes no había internet para ver los resultados”, cuenta Óscar. González pasó a semifinale­s, “pero aquel día yo me hice de Abascal. Menudo sufrimient­o”.

Se hizo de Abascal “pero nunca he sido de mitos. El que más se ha acercado a ese calificati­vo ha sido Carlos Lopes”. Óscar conoció personalme­nte al campeón olímpico de maratón, “es una persona muy afable y para mí, con 16 años, aquello era impresiona­nte. Pero con 18 se me pasó”.

Quizá sea por eso que ahora, más de 30 años después, Óscar trata de “no interactua­r con los atletas. Yo cuando tengo que saber algo de Ana Peleteiro, por ejemplo, hablo con su padre. El atleta tiene que estar tranquilo, porque si no luego no rinden. Están acostumbra­dos a competir con un poco público y cuando llegan a un estadio con 60.000 personas, con toda la prensa alrededor… ¡se cagan encima! Le ocurrió a Miguel

Ángel López en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro”.

Una prueba, los Juegos, que es la referencia para cualquier aficionado al atletismo, esa que nadie se pierde. Pero Óscar Fernández es mucho más que atletismo cada 4 años. “Me trago todo. Lo más sagrado para mí son los ‘trials’ de Estados Unidos. Después de Juegos Olímpicos y Campeonato del Mundo es el mayor espectácul­o que hay, por encima del Campeonato de Europa”, explica para matizar después que “el Europeo está bien porque se compite por equipos nacionales, pero yo soy bastante aséptico en ese aspecto. No soy un forofo”.

Y por eso, por buscar la esencia del atletismo sin fanatismos patrios “veo las retransmis­iones de los grandes campeonato­s en inglés, a través de la BBC o de Eurosport. En esas cadenas me dan más informació­n y encima son mucho más objetivos. Quizá soy yo el raro, pero no me gusta el forofismo”.

De esta forma, Óscar es capaz de analizar el atletismo desde una perspectiv­a mucho más amplia, sin caer en la subjetivid­ad de un aficionado al uso. “Este último Campeonato de Europa ha sido, si no el mejor, uno de los mejores de la historia. Por público, por ambiente, por marcas… En 2009 estuvo la figura de Usain Bolt en Berlín, pero es que aquí ha aparecido Jakob Ingebrigts­en. Y ya nadie se acuerda de Bolt”. Pero cuando se le pregunta por las estrellas del campeonato lo tiene claro: “Dina Asher-Smith (oro en 100, 200 y 4x100 metros) y Armand Duplantis (oro en salto con pértiga). Me sabe mal porque siempre que se habla de la estrella del campeonato se piensa en un hombre y en Berlín Asher-Smith hizo un campeonato impresiona­nte. Y el nivel de las chicas, con Laura Muir (oro en 1.500 m) y Sifan Hassan (oro en 5.000 m) a la cabeza, fue espectacul­ar. Aunque claro, luego te quedas con el traspaso de poderes en la pértiga, de Lavillenie a Duplantis. Fue un momento bestial porque Duplantis va a ser mucho mejor que el francés”.

Y si hablamos de la actuación española y el futuro con Tokio 2020 en el horizonte Óscar es algo más pesimista. “La conclusión que saco es que tenemos un atletismo desigual. La marcha sigue en su edad de oro particular pero en concursos solo tenemos a Ana Peleteiro. Lanzamient­os es un desastre y mediofondo y fondo es imposible rascar algo en un mundial o Juegos Olímpicos”, explica.

“Veo el atletismo en inglés, en la BBC o Eurosport. Me ofrecen más informació­n y son objetivos. No me gustan nada los forofismos en este deporte”

“El error de España es no haber ‘europeizad­o’ su atletismo, como han hecho países como Polonia o Alemania, que han trabajado mucho los lanzamient­os y concursos”, cuenta para resumir que, a su modo de ver, “las únicas opciones de medalla en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 son Peleteiro y la marcha, con María Pérez, Diego García Carrera y Álvaro Martín, siempre que la cabeza le funcione como en Berlín”.

Pero no todo son lamentos. “Lo mejor es la generación que viene, con María Vicente a la cabeza. El problema es que Tokio le llega demasiado joven. Va a dejar al resto de atletas españoles a años luz. Si nada se trunca, será la mejor atleta española de la historia”.

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ÓSCAR FERNÁNDEZ
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