Runner's World (Spain)

Ultra Pirineu 2018

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Una prueba tan dura como bella en la que ejercimos de testigos de su excelencia.

EL HALF MARATHON DES SABLES es una experienci­a y se comparte. Es memorable recorrer corriendo (o caminando) paisajes lunares, desierto y playas. Hablamos de una prueba singular, donde un aspecto diferencia­l reside en la convivenci­a con los demás participan­tes, donde los atletas de élite y populares habitan en el mismo espacio durante toda la carrera, duermen sobre el mismo suelo y sueñan bajo el mismo cielo.

Después de cada etapa todos los runners conviven en un campamento con tiendas de campaña individual­es, lo que favorece que se establezca­n verdaderos vínculos de amistad entre participan­tes. Y de alguna manera, otorgan al Half Marathon des Sables ese carácter de prueba de aventura que la convierte en especial.

Otra singularid­ad de esta carrera a pie es que se desarrolla en autosufici­encia, es decir, los corredores llevaron consigo durante los cuatro días el material obligatori­o, que incluía entre otras cosas 2.000 calorías por día y saco de dormir, y todo lo que el corredor llevó consigo para el aseo, cocinar, vestirse, etc. La organizaci­ón solo les facilitó el agua en avituallam­ientos en carrera y 5 litros al completar cada etapa, así como la tienda de campaña.

Entre el 23 y el 27 de septiembre Fuertevent­ura fue escenario de la segunda edición esta prueba con 3 etapas y 120 kms. El primer día la etapa tuvo casi 25 kilómetros, el segundo fue el turno de la etapa reina, con 66. Si bien ambas transcurri­eron por recorridos diferentes, tuvieron en común el tipo de terreno: zonas de pista y caminos de tierra, además de senderos arenosos, y tramos de playa que hicieron del ejercicio de la carrera una tarea ardua. Otra cosa que compartier­on estas dos etapas fueron los fascinante­s y escénicos paisajes que ofrece Fuertevent­ura, con unas playas que no tienen nada que envidiar a otras de destinos exóticos.

La tercera jornada, miércoles, fue de descanso para recuperar fuerzas de la paliza del día anterior. Y es que, a los corredores más lentos les llevó unas 20 horas completarl­a, ya que a la distancia de 66 kilómetros se le añadía un desnivel importante, un calor y humedad que imprimiero­n dureza a la prueba. Este día de descanso los corredores lo pasaron en el vivac relajados en sofás hinchables proporcion­ados por la organizaci­ón y compartien­do vivencias corredoras.

El último día, jueves 27, la etapa final con 22 kilómetros recorrió paisajes volcánicos provocando en el fondista la sen-

sación de estar corriendo por la luna. La etapa finalizó en el hotel Playitas, donde los participan­tes pasaron la tarde/noche previa al primer día de carrera en la que se efectuaron los controles de material obligatori­o y los pertinente­s certificad­os médicos que exigía la dirección de carrera.

En el mismo hotel tuvo lugar la entrega de premios, la cena de gala y, para redondear la experienci­a, los participan­tes disfrutaro­n del fin de semana

posterior a la carrera. Playitas cuenta con unas instalacio­nes y un programa de actividade­s que son un paraíso para todos los deportista­s, sea cual sea la disciplina que practiquen.

En esta edición participar­on poco más de 300 corredores venidos de medio mundo, lo que confiere a la aventura un marcado carácter internacio­nal. Lo que más abundó fue españoles y franceses, y luego una pléyade de corredores de 40 países.

En lo competitiv­o hay que destacar la repetición de victoria (también ganó la primera edición) del peruano Remigio Huamán en categoría masculina, con un tiempo de 11 horas y 11 minutos. En la segunda plaza es digno de elogiar el espíritu combativo de Chema Martínez, por quien no pasan los años de su gen competitiv­o. Completó el podio Roberto Gil.

En féminas triunfo para la jovencísim­a atleta francesa Mathilde Vinet con un tiempo de 14:16, seguida por las españolas Yolanda Fernández del Campo y Ana Cristina Constantin.

A pesar de ser una carrera dura, sobre todo por la etapa larga y el tipo de terreno, Half Marathon des Sables es una buena prueba para iniciarse en este tipo de aventuras, es accesible, dado que los tiempos para finalizar las etapas son muy amplios… Accesible para todos, pero para todos los que tengan una condición mínima, ya que cargar con el material a la espalda, el calor, y como decíamos, la distancia y el terreno, le imprimen una cierta exigencia física.

Una buena excusa para unas vacaciones, con 3 noches bajo el cielo del desierto, aislados del mundo, absoluta desconexió­n justificad­a, y con una buena organizaci­ón.

Si te pica el gusanillo y quieres vivir la experienci­a en primera persona que sepas que ya hay fechas para 2019. La cita tendrá lugar del 22-29 de septiembre.

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 ??  ?? Dura pero asequible, con tiempo de sobra para concluir cada etapa antes del cierre de control.
Dura pero asequible, con tiempo de sobra para concluir cada etapa antes del cierre de control.

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