LLEGA EL FRÍO
El frío es el principal agente físico para tratar lesiones de sobrecarga con importante dolor e inflamación. Como cierra los vasos sanguíneos y adormece los receptores nerviosos, puede calmar y cortar la difusión de la hinchazón de los músculos y ligamentos tras haber corrido a fuerte ritmo. Pero lo mismo que es un aliado para utilizar después del ejercicio físico, es un verdadero enemigo cuando arrancas a entrenar. Si partimos con el músculo frío, podemos dañarlo fácilmente. Por tanto, ya en otoño necesitamos más que nunca un buen calentamiento previo a la carrera. Así, el músculo estará más preparado para la exigencia de los kilómetros venideros. También será de gran importancia la elección de ropa técnica ligera, pero que abrigue y permita la correcta transpiración sin dejar sensación de piel helada. Hoy en día ir bien abrigados no es sinónimo de llevar muchas capas, imitando a las cebollas, porque por fortuna disfrutamos de un material textil tan evolucionado como las mejores zapatillas. Por todo esto, es tiempo de largos calentamientos y cierto abrigo. Así evitaremos lesiones musculares y afecciones respiratorias, típicos motivos otoñales de consulta médica.