Eficiencia escandinava
CRAFT V175 LITE
CUANDO UNA MARCA tiene su ADN claramente incrustado en la vida al aire libre, los amantes del esfuerzo aeróbico solamente pueden esperar cosas buenas de ella. Sucede con Craft, firma sueca fundada en 1973 que, prácticamente desde su nacimiento, adquirió una butaca privilegiada en las preferencias de los locos del outdoor (principalmente esquí de travesía, bici, trekking y atletismo) cuando de adquirir ropa técnica se trataba. Cada prenda es una delicia, un compendio perfecto de tecnología, diseño y alto rendimiento, de ahí que si alguna vez tienes la suerte de echar una carrerita por los países nórdicos, verás su logo estampado en el pecho de la gran mayoría de la gente con la que te cruces. Con tal bagaje a sus espaldas, ¿por qué no aprovecharlo para diseñar zapatillas?
Dicho y hecho. Son ya varias temporadas sacando al exigente mercado del running productos tan interesantes como la V175 Lite, una herramienta pensada para los que no les gusta dormirse en los rodajes, los amigos de los ritmos vivos. Responde bien en entrenos específicos (principalmente en series a partir de 1.000 metros) y competiciones, sobre todo si te gusta un tipo de calzado que, sin dejar de ser reactivo y medianamente ligero, te aporta ese plus de seguridad tan necesario para la musculatura cuando los kilómetros empiezan a caer.
Podríamos definirla como una mixta ‘asfaltera’ pura, no hay más que observar detalladamente el dibujo de su suela, con surcos en forma de flechas horizontales y verticales que garantizan un agarre superlativo incluso en condiciones bastante adversas (la típica tormenta que te sorprende en pleno esfuerzo y hace que cada pisada se convierta en un acto de fe). Y es que uno de los grandes aciertos de esta zapatilla es recurrir a la tecnología Vibram Megagrip para evitar resbalar, algo muy pocas veces visto más allá del
mundo del calzado específico de montaña (pero ya lo hemos dicho, vienen del norte, y allí hay más días para mojarse que para tomar el sol).
Su amortiguación no es de las que empalaga. Hace su trabajo y lo hace bien, sin propiciar que nos dejemos segundos por efecto del acolchado. En la media suela incorpora dos compuestos diferentes; una capa de phylon clásico en la parte baja para mantener la estabilidad sin aportar gramos de más y, en la zona alta, otra más fina, pero mucho más reactiva, que provoca un rápido despegue del pie. La mezcla de ambas produce una agrada- ble sensación al correr, un avance suave, de poco impacto contra el pavimento (su drop es de 6 milímetros, con lo cual el talón no apoya demasiado y la transición de la pisada es ágil y efectiva). Hablando del talón, se encarga de su protección un marco de plástico (TPU blandito) fuerte, el mismo que encontramos en menor densidad en puntera y laterales. La horma es ancha, dificultando que ceda a los lados, por lo que la encontrarán solvente tanto neutros puros como pronadores moderados. A ese cometido, la apuesta por la buena sujeción, ayudan unos refuerzos de plástico (muy finos) termo-pegados a la malla del upper (el cuerpo superior de la zapatilla, para los neófitos) que, de paso, evitan roces en el interior.
Si tuviéramos que referirnos a ella en una sola frase, no podríamos encontrar una definición mejor que la de nuestro Jefe de Área de Material, Javier Moro, quien supo sintetizar a la perfección esta manifestación deportiva de la mejor tradición del diseño escandinavo: “Simples, pero resistentes”.
Peso: 280 g (hombre) y 230 g (mujer)
PVP: 105,99 €
craftsportswear.com