SABÍAS QUE...
El estrés sufrido durante este periodo puede ocasionar desequilibrios inmunológicos y endocrinos, que favorecen tanto síntomas psíquicos, como depresión o ansiedad, o físicos, en forma de dolores muy variados.
Una regla de oro de la readaptación tras una lesión o un parón es no incrementar más de un 10-15% el volumen de entrenamiento de una semana para otra.
Tenemos la oportunidad de empezar de nuevo y comenzar a correr de una forma más segura y saludable, tras un periodo en el que hemos podido pensar en nuestros puntos fuertes y débiles.