AUDACIA CUSTOM
¿CÓMO TENDRÍA QUE SER UNA CUSTOM PARA QUE PUDIÉRAMOS DEFINIRLA COMO "AUDAZ"? MOTO GUZZI NOS PRESENTA SU PROPUESTA.
La Moto Guzzi Audace es una de las motos con más personalidad que te puedes encontrar en 2018. Sus líneas, con la presencia del motor V-Twin y los escapes subrayando los dos laterales, su sonido en marcha, la forma como actúa el motor de arranque o sus "cabezazos" si das golpes de gas en punto muerto, son esencia Guzzi por todos lados. Es grande, larga y no muy alta. Un peso de 299 kilos sin gasolina se notan en parado, pero no es difícil subirte y levantarla de la pata de cabra. Le das al botón de arranque y te saluda con un sonido peculiar del motor de arranque y un cabeceo lateral consecuencia del cigüeñal longitudinal cuando comienza a girar, algo muy Guzzi. Ralentiza con ciertas vibraciones que no molestan y sí le dan un toque custom agradable, ya que en cuanto abres gas, desaparecen. Metes primera, sueltas el embrague (por cierto, muy fácil de accionar) y se pone en marcha con suavidad. Puedes seleccionar uno de sus tres modos de funcionamiento pulsando sobre el mismo botón de arranque. Cambia el modo en la pantalla y se queda sombreado hasta que cojas el embrague y lo vuelvas a soltar, momento en que entra en acción el modo seleccionado. En cualquiera de ellos es suave, con una primera bastante larga. No hay problema: la cantidad de par disponible la mueve casi hasta al ralentí. El modo Turismo es el más lógico. La moto responde desde muy abajo, con contundencia si así lo quieres, pero sin violencia ninguna. Vas engranando marchas y puedes llevarla a muy pocas vueltas. En cualquiera de ellas, si abres, responderá inmediatamente. En modo "Veloce", esa respuesta es más contundente aún, y ante aperturas rápidas del gas sale disparada hacia delante. Es como aprecias de verdad esa cantidad de par disponible. En modo "Pioggia" (lluvia, en italiano), la respuesta es tan sosa y plana como te esperas: perfecta para suelos resbaladizos. La parte ciclo está bien diseñada. La moto se nota noble y fácil desde el primer momento, a pesar de su masa. Gira lo justo, no demasiado pero tampoco demasiado poco. Pero es una moto bastante larga. No es fácil maniobrar en parado en sitios estrechos. Por fortuna, se llega muy bien al suelo aunque midas poco más de 1,60 m.