El ajuar del bebé
Qué necesita un recién nacido? Pues sobre todo, mucho cariño. Pero además, hay una serie de imprescindibles que cubrirán sus necesidades de higiene, sueño, alimentación... La lista puede ser tan larga como se quiera, pero lo cierto es que ni todo es necesario ni hace falta desde el primer día. Estas indicaciones te pueden ayudar:
Ropa
Bodies. Lo mejor es que los bodies tengan corchetes delante y en la entrepierna, para que sea más fácil cambiarle el pañal sin tener que quitárselo. Como algunos recién nacidos ya usan bodies de «un mes», conviene comprarlos de diferentes tallas. Y para que las etiquetas no les piquen, siempre es mejor cortarlas.
Pijamas. Al principio, durante los primeros meses, pasará casi todo el tiempo que esté en casa con un pijama. Por eso han de ser cómodos, a ser posible fáciles de poner y quitar. Al igual que los bodies, es bueno comprar tallas diferentes.
Gorros. Los bebés suelen perder más calor por la cabeza, por eso conviene que lleven gorro si es invierno.
Calcetines. Aún no va a utilizar calzado, pero sí conviene taparles los pies con unos calcetines o patucos para que mantengan la temperatura (también pierden calor por los pies).
Conjuntos de paseo. Los pediatras recomiendan sacar al recién nacido de paseo a diario si no hace un tiempo demasiado extremo. Para ese momento, podemos ponerle todo lo guapo que queramos. Solo un consejo: cuanto más cómoda sea la ropa y menos adornos tenga (lazos, etc.), mejor.
Toquilla o manta. Es muy socorrida si estamos en la calle y se levanta algo de aire. O si a primera hora de la mañana en casa aún no hemos encendido la calefacción y hace un poco de fresco. De todas formas, solo hay que tapar al bebé si es necesario: la mayoría de los padres solemos obsesionarnos con que no pase frío y acabamos abrigándoles en exceso. Una regla básica para acertar: ponerle una prenda más de la que llevamos nosotros. O tocarle la punta de la nariz: si está fría, es que tenemos que abrigarlo un poquitín más. Por el contrario, si le tocamos la nuca y está sudando, podemos quitarle algo de ropa.
Para dormir
Minicuna, capazo o moisés. Se pueden usar hasta los seis meses y la ventaja respecto a la cuna que usará después es que al ser un espacio más recogido, se sentirá más protegido.
Ropa de cama para la minicuna. Con un par de sábanas bajeras ajustables que podamos lavar y una colcha ligera es suficiente.
Cuna. Hay que fijarse en que cumpla la normativa europea: si tiene barrotes, tendrán el borde romo y una separación de entre 4 y 7 centímetros para que no pueda meter la cabeza por ellos. En el caso de que sea heredada, lo importante es que si tiene partes metálicas al alcance del niño, no tengan corrosión y que tanto las ruedas como el sistema de frenado funcionen correctamente.
Colchón. Los más recomendados son los semirrígidos, con unos 10 centímetros de alto. Si es heredado, hay que vigilar que no tenga deformidades que, aunque no se aprecien mucho a la vista, pueden resultar perjudiciales para la espalda de un bebé, que todavía está sin acabar de formar.
Ropa de cama para la cuna. Dos o tres juegos de sábanas y una colcha.
Chupetes. Seguramente no los usará en las primeras semanas, pero por si acaso no está de más tener un par.
Interfonos. Aunque lo habitual es que no nos alejemos mucho del bebé, si tenemos una casa grande podremos escucharlo mientras hacemos la comida, ponemos la lavadora...