«A medida que crecen vas dándoles libertad, pero con responsabilidad»
Sandra Llorca Madre de Manuel, Celia y Alejandra, de 14, 9 y 6 años.
Vas aprendiendo a ser madre a medida que van creciendo. Te equivocas, pides perdón y aprendes. No pasa nada. Nunca he sido una madre excesivamente proteccionista, pero cuando todavía son muy pequeños te preocupas por todo, también por cosas insignificantes. Sin embargo, cuando crecen, la relación va cambiando. Vas dándoles más libertad aunque con responsabilidad, hablas mucho más con ellos... Es una relación muy bonita, no de amistad pero sí de confianza. Saben que siempre voy a estar ahí, tanto para lo bueno como para lo malo, y que pueden contarme cualquier cosa. Lo que más estoy disfrutando ahora es la cantidad de planes que ya puedes hacer con ellos: ir juntos a la playa, a bucear, de viaje...
En el día a día, procuramos funcionar como un equipo en el que nos ayudamos los unos a los otros. Hacen las camas, limpian sus zapatos, preparan el uniforme del día siguiente, ponen y quitan la mesa, hacen los deberes solos... Así aprenden que la vida no es que te lo den todo hecho. Y al mismo tiempo, busco algo de espacio para mí. Creo que eso es fundamental. No dejas de ser persona por ser madre.
Trabajar fuera de casa, ser madre de familia numerosa y mantener tus aficiones es cuestión de organizarse. De hecho empecé a tejer, que es la afición que me llevó a abrir el blog poleomentatejiendo.com, cuando estaba embarazada de la pequeña, que era una etapa más demandante por parte de ellos. Ahora participamos todos de alguna forma en el blog. Mi hija mediana ya teje, la pequeña está aprendiendo y al mayor le encanta escribir, así que él me ayuda con los textos, ya que suelo contar historias relacionadas con la prenda que estoy haciendo.
Tener hijos es lo más maravilloso del mundo. El balance es muy positivo. ¡Ojalá viniera alguno más!
«Es una relación muy bonita, no de amistad, sino de confianza. Saben que siempre voy a estar ahí, tanto para lo bueno como para lo malo»