Cómo aliviarlo
Una succión correcta: si la lactancia es materna, hay que asegurarnos que tenga una postura correcta al mamar. Si es con biberón, hay productos que la facilitan. Probióticos o infusiones: por el momento, no hay medicaciones efectivas. Pero el pediatra puede prescribir algún producto en base a su experiencia. Masajes: no son un tratamiento en sí, pero sí alivian. Masajea el vientre suavemente en el sentido de las agujas del reloj o coge sus pies acompañando las rodillas hacia el vientre. Hay que aprovechar los momentos en los que esté tranquilo, nunca cuando llora porque estará rígido.