¿Cómo puedo ayudarle?
Debemos enseñarle a relajarse en presencia de extraños y en situaciones sociales que le incomodan. Y una vez que es capaz de mantener la calma y estar receptivo, entonces ya podremos enseñarle habilidades de interacción, que son aquellas necesarias tanto para expresar emociones, deseos, quejas, como para conversar, defenderse y hasta para saber jugar. Una vez entrenado ya podrá enfrentarse, si así lo desea, poco a poco, y siempre que haya alta probabilidad de éxito, a situaciones sociales incómodas para salir reforzado de ellas. También le ayudará el estar rodeado de otros niños menos tímidos, y observar cómo disfrutan de las ventajas que conlleva el enfrentarse a la timidez.