El seguro que te conviene
¿Está tu coche preparado para cualquier suceso? ¿Sabes qué coberturas se adaptan mejor a ti? Pues toma nota, aquí te dejamos algunas.
Básico: asistencia en viaje
Ayuda de transporte para las personas y el vehículo. Esta cobertura es esencial. Nunca sabes cuándo tendrás una avería o accidente, por lo que será imprescindible que te trasladen a tu destino y lleven tu coche hasta el taller. Además, si el seguro cubre disponibilidad inmediata las 24 horas, mejor. Apunta bien el número de tu aseguradora y llévalo siempre a mano.
Cobertura antirrobo
Tras el siniestro se cubre la indemnización por los daños causados por el robo del vehículo completo o de sus piezas y los producidos en y durante el robo. En caso de sustracción total del automóvil se puede optar por la indemnización o por la sustitución del mismo.
Cobertura de pasajeros
Además del seguro del conductor, podrías incluir la cobertura de tus acompañantes en caso de accidente. Así, si es necesaria la asistencia sanitaria todos los pasajeros están cubiertos económicamente.
Por la retirada del carnet
Con el subsidio por privación del permiso de conducir se paga una indemnización al conductor al que hayan retirado el carnet. Además, en algunas pólizas es posible el pago de otra indemnización si se realizan cursos de recuperación parcial de puntos siempre que el resultado haya sido satisfactorio.
Ten en cuenta a los menores
La responsabilidad civil del hijo menor de edad conduciendo sin carnet es una cobertura muy específica, pero si tienes hijos en esa edad complicada, te puede interesar. La compañía aseguradora cubre la responsabilidad civil en caso de que el hijo menor de edad del asegurador coja el coche sin el debido carnet de conducir. Las compañías aseguradoras aclaran que reprueban este tipo de conducción y que no se hacen cargo de la multa que pueda acarrear.
Gestión de multas de tráfico
Esta cobertura ofrece asesoramiento jurídico sobre las multas de tráfico del asegurado. En estos tiempos, en los que parece que la policía tiene más ganas de multar, las sanciones aparecen aunque seas un conductor de primera. Si no sabes cómo actuar o simplemente no tienes ni tiempo, ni ganas de hacerte cargo de las multas, quizá quieras ampliar tu cobertura y olvidarte de los papeleos. Con ella, la aseguradora prepara, redacta y presenta recursos, pliegos de descargo y alegaciones ante el organismo competente en nombre del asegurado.