“La escuela no responde”
Los niños con altas capacidades tienen problemas para controlar sus emociones. Un niño de 12 años, por ejemplo, puede tener una capacidad de gestión emocional de 8. Muchas veces estas dificultades hacen que les tilden de lloricas o parece que se toman las cosas muy a pecho… Por eso se sienten tan a gusto en nuestros talleres grupales de control de emociones, donde aprenden habilidades de comunicación desde un punto de vista muy lúdico y sin sentirse juzgados por cómo son. Además, trabajamos con las familias, ya que ser padre de estos niños no es nada fácil porque tienen que saber motivarles y entenderles…
Desde la escuela no dan respuesta a sus necesidades emocionales. Por no hablar de la desatención total que hay de los niños a un punto o a dos de la superdotación intelectual (128 o 129), que tienen exactamente los mismos problemas emocionales que los demás, y de los que la escuela pública se desentiende totalmente.