El perro, el mejor amigo para aprender bien.
Todos sabemos que los animales son excelentes terapeutas. De hecho, se utilizan para abordar muchos problemas como la depresión en mayores, aliviar la soledad o mejorar trastornos como el autismo.
Los animales también pueden ayudar a los pacientes a controlar su diabetes. E incluso los hay que detectan el melanoma. Pero si hay un colectivo que se beneficia de las virtudes de estos peludos son los niños. Y es que, para ellos, la compañía y el apoyo de un compañero de cuatro patas puede marcar la diferencia.
¿Qué es el programa Perros y Letras?
Perros y Letras, auspiciado por la empresa de alimentación Dingonatura, surge como parte del programa internacional R.E.A.D. de lectura con perros (Reading Education Assistance Dogs) que mejora las habilidades de lectura, la comunica-
ción, así como la interacción social de los niños. Se trata de una innovadora terapia que incentiva a los niños con problemas a leer.
Para lograrlo, un terapeuta y su perro se sientan con el pequeño en una alfombra o manta y este elige un cuento que leerá al perro. Mientras tanto, el animal se tumba o se sienta a su lado y permanece atento a la lectura. “El éxito radica en la conexión que se establece entre el niño y el perro. Es un momento mágico porque por muchas cosas que sucedan alrededor de ellos, la lectura prosigue y el menor se asegura, constantemente, de que el perro está escuchando y entendiendo lo que le cuenta”, explica Elena Domínguez, directora del programa. El método ha sido contrastado en 17 países y su éxito radica en la conexión emocional que se establece entre ambos.
¿A quién va dirigido?
A cualquier niño de tres años en adelante con problemas de lenguaje, comprensión, dislexia, con bajos recursos y cuyo segundo idioma es el español, con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) e, incluso, autismo. De hecho, en este último caso se están obteniendo excelentes resultados.
Los niños que participan en el programa disponen de un compañero-oyente, el perro, que no juzga, como sí lo haría un humano, y que participa en la sesión‘leyendo’con el niño y este se relaja.
¿Cómo se comunica el perro?
Se utiliza un movimiento de pata de los perros para corregir amablemente a los lectores. Es decir, cuando un pequeño se equivoca al leer, el perro mueve la pata para indicar que ha habido algo que “no le ha sonado bien”. La lectura se convierte así en un acto lúdico y divertido, donde todo discurre alrededor del animal, estimulando la motivación, concentración e imaginación del niño. El desarrollo de las sesiones, que tienen lugar en colegios y bibliotecas públicas, es muy flexible, adaptándose a las diferentes necesidades de los pequeños.
¿Son perros especiales?
Cualquier perro puede pertenecer al programa Perros y Letras, excepto, en España, las razas denominadas peligrosas. Los animales son especialmente adiestrados para esta función y pasan un riguroso examen cada dos años, que incluye apartados como la obediencia y el vínculo entre animal y dueño. De hecho, es muy importante que este sea muy estrecho y especial, ya que juntos forman una unidad de trabajo. Según Susana de Pedro, de Dingonatura, “es emocionante comprobar cómo el llamado mejor amigo del hombre es capaz de ayudar a un niño a superar sus dificultades y mejorar su capacidad de lectura juntos. Se trata de una labor tan loable que Dingonatura ha querido formar parte de este proyecto contribuyendo con la alimentación a que los perros vivan muchos años y puedan seguir mejorando la vida de estos niños”.