Saber actuar
Los pequeños accidentes durante el verano son normales y no deben asustarnos, pero sí hay que prestar atención a los pequeños para evitar disgustos.
Primeros auxilios en verano.
Más accidentes. Con el verano aumentan las actividades al aire libre, los viajes, las excursiones… Con mucho, las lesiones más frecuentes son las debidas a caídas y golpes. Pero las más graves suelen ser las lesiones debidas a accidentes de tráfico y los ahogamientos. Cuidado con el golpe de calor. Para evitarlo, es muy importante hidratar bien a los niños, ofreciéndoles agua en pequeños sorbos cada cierto tiempo. También hay que vestirles con ropa ligera, que transpire, holgada y de color claro. Ponerles sombrero y gafas de sol.
Ojo con el coche. Puede doblar la temperatura externa, ya que retiene el calor. Por ello, nunca hay que dejar a un niño dentro de un coche estacionado y cerrado ni siquiera a la sombra, porque el efecto es el mismo. Mucho menos al sol, aunque se dejen las ventanillas bajadas.