Seguridad

Muchos niños, mucha gente, muchos juegos, muchas distracciones... A veces, en solo un momento, se pierde a los niños de vista. El terror, los nervios, la angustia -en ellos y nosotros- no ayuda.

Qué hacer si se pierde.

Qué hacer para que no se pierdan

Los niños no siempre reconocen un peligro, pero no se les puede prohibir todo. Es importante que sepan que papá y mamá están cerca y que no deben perderles de vista.

Que avisen si se mueven, que aprendan a pediros permiso para hacer una actividad nueva o con otros niños.

Estaos atentos, es la mejor precaución. Recuerda que tú eres el adulto, no él.

Darles seguridad, decirle que aunque se pierda siempre vais a aparecer y que le encontréis.

Qué hacer si se pierden

”¡No te muevas de ahí!” Hay que enseñar a los niños la importancia de que si se pierden se queden donde están. Papá y mamá aparecerán.

Que se hagan notar: que griten, que pataleen, que enseguida los adultos del lugar reconozcan en él a un niño que se ha perdido.

A partir de los 3 años se les puede enseñar a memorizar tu móvil y explicarles qué ellos tienen que intentar hacerse encontrar: “En cuanto veas a una madre con un niño, alguien de uniforme… Diles tu nombre y el móvil de mamá. Recuerda que si estás nervioso se te puede olvidar”. Pese a nuestras advertencias muchos niños tienden a salir a buscar a sus padres y, según datos de la Policía, tienden a volver al último sitio en el que recuerdan haber estado con ellos. Por eso es importante, aunque cueste, que uno de los dos se quede donde está por si el niño aparece.

Qué hacer cuando aparezcan

No descarguéis vuestra desesperación y angustia en él. No es momento de regañinas.

Decidle lo mucho que lo queréis y la alegría por haberle encontrado.

Más tarde, analizad juntos por qué se ha perdido y lo que no debe volver a pasar.

Qué hacer si te encuentras a un niño perdido

Cálmale, pregúntale su nombre, dile el tuyo… Que se sienta seguro, aunque no te conozca. Quizá sepa el número de teléfono de sus padres.

Cógelo en brazos y súbete a un poyete, banco o similar. Muchas veces es la mejor manera de que sus padres le vean.

Si estás en un sitio con megafonía pide que avisen del extravío del niño a la mayor brevedad.

Si pasa el rato y no aparecen sus padres, llama a la Policía, sin dudarlo.