¡No te la saltes!
La gran importancia de esta prueba de diagnóstico prenatal es que la mayor parte de las alteraciones fetales detectables son reconocibles en la semana 20 de embarazo. El foco se pone en la correcta evolución del riesgo y severidad de las posibles alteraciones tanto por parte de los profesionales como de los padres. Aunque hayamos tenido un buen resultado en las primeras ecografías, no debe obviarse la de la semana 20.
Dra. Marta Verdejo Ginecóloga del Hospital Vithas Nisa Pardo de Aravaca