Endometriosis
¿De qué se trata?
La endometriosis afecta a 1,5 millones de mujeres en España. Independientemente de su edad, cualquier mujer puede padecerla. Según explica Isabel Sánchez Magro, directora del departamento médico de Merck, “trata de una enfermedad ginecológica en la que se produce una implantación y un crecimiento benigno de tejido del endometrio fuera del útero dando lugar a una reacción inflama- toria crónica”. Aunque son varias las zonas que pueden verse afectadas, lo más frecuente es que esa reacción la sufran los ovarios, las trompas de Falopio, la vagina y, en menores ocasiones, el peritoneo o el tracto gastrointestinal y urinario. En cuanto a sus lesiones tienen un pronóstico incierto ya que, como matiza la experta, “pueden permanecer estables, progresar e incluso retroceder”.
Lo que influye
Sus causas siguen siendo un misterio. Lo que sí se sabe son los posibles factores relacionados con la enfermedad: la menstruación, la reproducción, el estilo de vida y los factores genéticos. “El sangrado muy abundante o la presencia de ciclos cortos pueden favorecer su aparición, así como situaciones estructurales anormales que afecten al paso correcto de flujo por la vagina”, indica Sánchez Magro. La reproducción también influye, ya que no haber estado embarazada nunca podría incrementar las posibilidades. En lo relacionado al estilo de vida, la experta señala que“en la aparición de la endometriosis afecta consumir alcohol, tabaco y café, así como las grasas saturadas”. Asimismo, algunas teorías apuntan a la falta de actividad física y el sobrepeso, “pero no hay datos concluyentes suficientes para confirmarlo”, matiza. Además de estos factores, se cree que existe predisposición genética a la endometriosis, llegando a darse varios casos en una misma familia.
Sus síntomas
Algunos son más intensos durante el periodo menstrual. Los más comunes son el dolor pélvico y el abdominal, y a estos se suman las menstruaciones dolorosas, los dolores durante las relaciones sexuales, las hemorragias o dolor en otros lugares del organismo (como la espalda), y la infertilidad. Esta última es de las peores consecuencias de esta enfermedad, puesto que entre un 25 % y 50 % de las mujeres encuentra dificultades a la hora de tener hijos. El diagnóstico y abordaje temprano de la enfermedad serían importantes en la conservación de la función ovárica. Por lo que en el caso de mujeres con endometriosis en fases avanzadas que estén buscando el embarazo, la experta aconseja que “acudan a unidades o centros de reproducción para proceder a un tratamiento de fertilidad”.
¿Cómo se cura?
Una vez diagnosticada, Sánchez Magro puntualiza que “el tratamiento ha de ser individualizado para considerar tanto los síntomas de la afectada como la gravedad de la enfermedad”. El método puede ser médico, quirúrgico y psicológico. Para eliminar sus síntomas se emplea terapia hormonal y analgésicos que, “son eficaces para disminuir el dolor pero no todas las mujeres responden de la misma manera”, destaca. Mientras que para quitar la endometriosis visible se recurre a la laparoscopia, lo que “permite diagnosticar con más precisión y operar de manera completa las lesiones permitiendo una mejor fertilidad posterior”, explica Sánchez Magro. Tanto el tratamiento como la cirugía tienen el objetivo de restaurar la fertilidad y de actuar sobre la progresión de la enfermedad. En cualquier caso, la experta recuerda que “hay que actuar con rapidez”.