Buenos cuidados
Cuidan de tus hijos a la vez que les enseñan un idioma distinto. Por eso esta figura cada vez está más demandada.
Cómo elegir au pair.
Hay ocasiones en las que a los padres no nos queda más remedio que confiar en una persona ajena para el cuidado de nuestros hijos. El motivo principal suele ser el horario laboral que nos impide pasar el tiempo necesario en casa. Mientras esperamos a que algún día se haga realidad la tan anhelada conciliación de la vida laboral y familiar, no dejamos de buscar soluciones para proporcionar una infancia lo más agradable posible a nuestros pequeños. Y puede que las guarderías infantiles o los horarios extendidos de colegios nos hayan salvado la vida muchas veces, pero para los niños no es más que una continuidad de su rutina. De nuevo cargados con sus mochilas y yendo de un lado para el otro.
Este es el elemento diferencial entre una au-pair y cualquier figura de cuidador tradicional. Los
niños pueden pasar más tiempo en casa, con sus hermanos y disfrutando de su hogar. Este servicio se ha hecho popular entre padres sobre todo por ofrecer la oportunidad de que sus hijos aprendan un nuevo idioma. Eso sí, como se trata de encontrar a alguien que se responsabilizará de la seguridad de los niños, acoger a una au-pair es una decisión que no se debe tomar a la ligera.
■ ¿Cómo puedes prepararte?
Antes de acoger a una au-pair es muy importante aclarar tus expectativas. ‘’El secreto de las familias que aciertan con su elección está en las propias familias’’, afirma Aida Tosar, directora de Au Pair in Spain y presidenta de AEPA. ‘’Tu au-pair es una persona joven que viene para aprender el idioma y la cultura de tu país a
cambio de transmitir sus conocimientos a los niños y quedarse con ellos cuando tú no estás, pero no son educadoras ni psicólogas’’, añade. Es un error tener las expectativas muy altas y exigir demasiado porque al fin y al cabo se trata de gente joven. Lo que es una ventaja no debemos convertirlo en una mala experiencia. Es muy conveniente que las au-pairs tengan una edad relativamente próxima a la de nuestros hijos, ya que una persona mayor seguramente no podría hacerse cargo de dos niños inquietos de 6 años. Hay que elegir pensando en alguien que podrá acompañarles en cualquier actividad de su vida diaria más allá de cubrir sus necesidades básicas (comida, aseo, vigilancia).
■ Así es como te benefician
‘’Tener a una au-pair hace madurar a la familia. Es una frase que numerosos padres me han confesado tras su experiencia’’, dice Aida Tosar. Y lo cierto es que las ventajas son muchas y se hacen ver enseguida. Podrás retomar algunas de tus actividades que por falta de tiempo tuviste que abandonar, tales como cuidarte más, ir de compras, realizar algún tipo de ejercicio, etc. Además, la sensación de tranquilidad que te da ver a otra persona adulta en la casa es inigualable. Esto se traduce en una mayor paciencia con los niños y menos estrés para los padres.
■ ¿Cómo seleccionar?
Para encontrar a la persona que reúna todas estas cualidades se puede acudir a una agencia. Son fiables y aportan referencias contrastadas, asimismo permiten a los padres tener un lugar al que acudir en caso de que surja algún problema. En la agencia pueden mostrarnos los credenciales de la persona que nos interesa, los estudios que tenga, algún título o experiencia relacionada con primeros auxilios y los contactos de las familias con las que trabajó anteriormente si necesitamos más información para sentirnos más seguros. ‘’Sé sincero a la hora de llegar a una agencia y cuenta toda información que consideres relevante. Muchas familias ocultan la enfermedad o trastorno que tienen sus hijos, por lo que quejarse luego de la incompetencia de la au-pair no es justo’’, explica Aida. Eso ayuda a la agencia a seleccionar entre las candidatas y hacer que su propuesta final sea lo más compatible posible con el perfil de la familia.
■ La entrevista
‘’Es fundamental conocer las limitaciones que hay en los servicios que prestan las au-pairs para no poner en ellas demasiadas expectativas. A partir de ahí, siempre animo a los padres valorar las candidatas que están motivadas, abiertas, tolerantes y simpáticas’’, aconseja Aida. ‘’Son muchas las familias que se interesan solo por el idioma y que las chicas sean nativas, pero eso no lo es todo’’, añade. El aprendizaje va a ser real y significativo, porque mientras cocinamos la cena y estamos charlando con nuestra au-pair se aprende mucho más que en cualquier clase particular de academia. Y los peques lo mismo, juegan con ella, comparten su día a día, en inglés, y evidentemente, ella les ayudan con los deberes. Sin embargo, todos deben tener su descanso, así que no debes esperar a que la joven hable todo el día en su idioma. Tienes que respetar sus horas de descanso y crear un ambiente acogedor y amigable para ella. Encontrar el punto de equilibrio entre cumplir con las responsabilidades y el tiempo libre puede ser difícil para algunas familias, ya que ambas partes tienen que querer que la cosa funcione. Ni los padres deben pedirles demasiado y ser estrictos con ellas ni las chicas pueden escaquear para viajar y salir de fiesta sin haber cumplido con sus tareas diarias. ‘’Para ver si cuadra, lo mejor es empezar a entrevistar a la chica contándole cuáles son tus expectativas de esta colaboración y preguntarle por las suyas. Es una pregunta que no deja espacio a dudas’’, concluye nuestra experta.