La felicidad completa
nueva estrella blaugrana irradia alegría. Sobre el terreno de juego, las cosas le van viento en popa a Neymar y, en casa, la familia ha recibido la visita más esperada
E sta última semana el júbilo se ha instaurado en casa de los Da Sil
va Santos en Pedralbes. Y no se trata sólo por el buen desempeño de Juninho – como le llaman cariñosamente a Neymar sus familiares y más allegados – con la camiseta 11 blaugrana. La razón del alboroto es la presencia de un pequeño ‘terromoto’ rubio de mirada profunda.
Davi Lucca, el heredero, hace una semana llegó a Barcelona para pasar unos días con su familia paterna.
Un desliz acabó convirtiéndose en la mayor alegría de la vida de Neymar. Hace dos años, la joven Carolina Dantas, residente en la ciudad Santos, y el entonces buque insignia del Santos FC, de 19 años, se convertían en padres prematuros. El 24 de agosto de 2011 nacía en el Hospital Sao Luiz de Sao Paulo,
Davi Lucca.
La paternidad cambió, a positivo, el día a
día de Ney. La encaró como todo lo que ha hecho en su vida, con precoz responsabilidad. Nueve meses atrás, cuando supo de la noticia, el susto fue del mismo calibre que la bronca paterna que recibió. Las dudas se transformaron en sonrisas. Cogió el toro por los cuernos y fue a hablar con la familia de la
joven estudiante. El ‘ Mohicano’ se propuso no sólo asumir lo ocurrido, sino convertirse en un padre presente y ejemplar.
La relación con la madre de Davi Lucca y su familia siempre ha sido excepcional. La propia chica reveló tiempo atrás en un magazine dominical de la Rede Globo. “Siempre que puede pasa a verlo. Lo compartimos todos de nuestro hijo. Sin estar presente en todo, siempre nos ha apoyado en lo que necesitamos. Es un padre maravilloso, mi familia y yo lo amamos muchísimo”, afirmó la joven estudiante en un vídeo grabado, que emocionó muchísimo a Neymar.
Estar presente significa, por ejemplo, querer presenciar el parto. Inmortalizó el momento, junto a su amigo y entonces compañero en el Santos FC, Paulo Henrique
Ganso. Durante su etapa en el Santos supo compatibilizar los entrenamientos, las concentraciones, los viajes, los partidos y la agenda cargada de compromisos comerciales, con las horas de sueño y juegos con el pequeño.
Y cuando Davi Lucca creció un poco, Neymar, así como hizo el día de la Mercè en el Camp Nou, saltó en brazos con él antes de los partidos. Es lo que en el fútbol brasileño se llama afectivamente ‘hacer de mascota’. El propio crack lo había sido cuando su padre era futbolista profesional en la Uniao Mogi, un equipo modesto del fútbol paulista. La imagen de ‘ Juninho’, con la camiseta 11 del Santos, con Davi Lucca en brazos antes de iniciarse los partidos en el estadio de la Vila Belmiro se convirtió en recurrente.
Desde el momento en que Neymar concretó su fichaje por el Barcelona la madrugada del 25 de mayo, el crack tenía claro
que no quería distanciarse de su heredero. En Santos se había especulado que uno de los motivos por los que había querido permanecer en el club, cuando tuvo ofertas para salir anteriormente, era precisamente
para estar al lado de Davi Lucca. Este era un discurso que alimentaba el presidente
–ahora de baja por enfermedad – Luis Álvaro de Oliveira Ribeiro–.
Neymar es lo que en Brasil se llama un ‘pai curuja’, o sea un padre cuidadoso, preocupado y que se desvive por su hijo. A principios de septiembre, cuando estuvo concentrado una semana en Brasilia para la disputa del amistoso de la Seleçao ante Australia, aprovechó la estancia en su país para estar junto a Davi Lucca. De hecho, el único internacional de la canarinha que saltó en el césped del Estadio Nacional de Brasilia, con un niño en brazos, fue el crack barcelonista.
Davi Lucca ha vuelto a ver a su padre ahora en Barcelona. La sintonía con la familia materna presume que éste va a ser el primero de muchos viajes del pequeño a la capital catalana. La fotografía de los herederos de Ney y Messi antes de un partido en el Camp Nou seguro que se repetirá.
El crack brasileño se hincha de felicidad, como demuestra las fotografías y los vídeos que ha colgado estos últimos días en las redes sociales. Los abuelos Neymar y Nadine, y la tía Rafaella se lo pasan en grande. Son días de diversión infantil en el hogar de una familia brasileña recién llegada a Barcelona, donde pretenden ser plenamente felices y quedarse muchos años para escribir un capítulo brillante de un club con más de 110 años de historia.
El brasileño disfruta de la presencia de su hijo Davi Lucca en Barcelona
Ney fue papá con 19 años y mantiene un vínculo estrecho con su hijo