Los cracks también se cabrean
Sustituido por Sergi Roberto a falta de diez minutos para el final, Messi quería seguir jugando, pero no despreció a su entrenador ni tuvo ningún mal gesto
E l detalle pasaría desapercibido con cualquier otro jugador: pero en torno a Leo Messi, todo es superlativo, lo bueno y lo no tan bueno. Al jugador argentino no le gustó que su entrenador, Gerardo Martino, le sustituyese en el minuto 80 del partido ante la Real Sociedad. Se f ue del campo cabizbajo, pero más enfadado por no haber podido culminar una de sus jugadas marcas de la casa (un eslalom que no pudo concretar en gol, porque el balón se le fue por encima del l arguero), que por el cambio en sí.
Leo, curiosamente, reaccionó a las críticas antes incluso de que se encendiera la polémica sobre su cambio. A l os pocos minutos de concluir el partido, colgó en su página de Facebook un comunicado aclarando que no tuvo ningún mal gesto con
Martino y que el beneficio del equipo es más importante que el individual. “Lo que no voy a aceptar es que ciertos medios salgan a decir mentiras sobre cualquier situación que sucede conmigo”, apostilló, y esas palabras sirvieron para encender aún más la mecha. Lo cierto es que el rictus de
Messi al ser sustituido no denotaba ninguna alegría, pero tampoco generó malestar alguno en el vestuario. Sus compañeros fueron l os que mejor le entendieron. “Es un jugador muy competitivo, y por eso es comprensible”, reflexionó Alves, “los j ugadores, para esto, somos muy egoístas, yo también jugaría todos los partidos, pero tenemos un entrenador que toma las decisiones y hay que respetarlas”.
Precisamente su entrenador fue el primero en quitarle hierro al asunto. Martino aclaró que había hablado con Leo nada más concluir el partido, dando por hecho que todo se trató de un desencuentro pasajero y secundario.
También quiso incidir en su idea de “cuidar” a Leo Messi. “Le sustituiré siempre que el partido me lo permita. Está claro que él nunca quiere salir del campo, pero mi obligación es cuidarlo”. El panorama del partido, ya con 4-1 en el marcador, hizo que Martino se decidiese a cambiar a su compatriota. “Estaría loco si en un partido que todavía no hemos cerrado, l o sacase del campo, pero en un partido ya sentenciado, intentaré quitarle minutos, no quiero arriesgarme a que se lesione”, aseguró el técnico. LA CALCULADORA DE MARTINO Martino, de hecho, parece contar con una calculadora de minutos reservada para Messi. Lo dejó caer al comienzo de la temporada: “si le vas restando minutos, al final es como si descansase un partido entero”, argumentó el técnico argentino. Lo hizo después de sustituir a Messi en el primer partido de Liga, ante el Levante (7-0), en el minuto 69, con 6-0 en el marcador.
Durante todo el año pasado, Messi solo fue sustituido por decisión técnica ante el Málaga, en la Copa del Rey. Martino ya le ha sustituido dos veces, ante el Levante y la Real Sociedad.
No es frecuente ver a Messi enfadado sobre un terreno de juego, pero algunas imágenes han quedado para el recuerdo: ocurrió el año pasado en el partido ante el Betis, por ejemplo, cuando falló una clara ocasión de gol y acabó golpeando la valla de publicidad. Síntoma de su extrema competitividad, porque aquel día ya había marcado dos goles y el partido estaba casi sentenciado (4-2).