De Benítez pinchó en San Paolo, donde no pasó del empate contra la cenicienta Sassuolo

aportó una idea futbolística que no acabó de cuajar, Zeman fue un regreso al pasado y Rudi García, el técnico que en 2011 hizo campeón al Lille, está llamado a ser el hombre que instale a los ‘giallorossi’ a la elite. Con una plantilla sin grandes nombres y la aportación de puntos, lo que nunca había conseguido en las cinco primeras jornadas. El único contratiempo sufrido ayer por los romanistas fue la expulsión de su entrenador Rudi García, que no podrá sentarse en el banquillo la próxima jornada contra el Bolonia.

El Nápoles, que fue incapaz de ganar al ascendido Sassuolo, un equipo que no había sumado ningún punto y que el domingo encajó siete goles en el casa contra el Inter, fue víctima de las rotaciones. Benítez cambió medio equipo respecto al que salió victorioso en San Siro y el Sassuolo se sonal de Benatia y a un gol in extremis de Gervinho, la Roma vuelve al primer puesto del campeonato en solitario, lo que no ocurría desde abril de 2010, y con un pleno le subió a las barbas ante el estupor de los aficionados napolitanos. Más acostumbrados a sufrir están los del Milan de un tiempo a esta parte. Sin el sancionado Balotelli, los rossoneri sudaron tinta para llevarse un punto de Bolonia, con dos goles agónicos de Robinho y Abate.

Por su parte, la Juventus regresó del campo del Chievo con los tres puntos en el zurrón pero también con la sensación de que el equipo de Conte está cansado física y psicológicamente. Los bianconeri no juegan bien ni van sobrados de ideas y encima ayer se vieron beneficiados por el árbitro, que anuló un gol legal al exmilanista Paloschi.