VENGANZA ROJIBLANCA
El conjunto colchonero se vengó, por fin, de las últimas finales perdidas ante los blancos. Tardó en llegar pero llegó
Los atléticos reconocieron que le tenían ganas a un Madrid al que humillaron
Dicen que la venganza es mejor servirla en frío. Y eso es justo lo que ha ido planeando el Atlético de Madrid en los últimos meses: cómo darle la vuelta a la tortilla y pasar de perder dos finales consecutivas de Champions ante su gran rival a poner al Real Madrid entre la espada y la pared tras ganar merecidamente la Supercopa de Europa. Un plan muy bien meditado y llevado a cabo a la perfección. Y es que el Atlético de Madrid no ha parado de crecer desde que el conjunto blanco les birlara dos Champions y les apeara de la penúltima edición tras endosarles un contundente 3-0 en la ida de las semifinales. Pero el Cholo Simeone no quiso hincar la rodilla ante la evidencia en los últimos años: el Real Madrid se hace grande en Europa. La idea no era otra que la de tratar de hacer desaparecer la idea de que el Atlético de Madrid sería incapaz de ganar al club blanco en el viejo continente. Algo parecido a lo hizo que en Liga, logrando que los blancos tan solo hayan podido ganar un encuentro de los diez encuentros que se han disputado en los últimos cinco años.
UN CLUB AMBICIOSO Algo que ha conseguido, en cierto modo, renovando a sus estrellas, entre las que destaca Griezzmann, y fi- chando un fondo de armario capaz de ganarle una Supercopa de Europa en los últimos minutos del partido al eterno rival. Sin el famoso presupuesto que Simeone busca ocultar constantemente, el Atlético de Madrid lo hubiera tenido mucho más complicado. La figura de Lemar, fichado por 70 millones de euros, y Diego Costa, que volvió por cerca de 60, fueron piezas vitales para demostrar que el que manda en la capital ya no tiene una respuesta tan unánilas me. El conjunto del Cholo ha sido capaz de confeccionar una plantilla capaz de competirle de tú a tú a todo un Real Madrid que viene de ganar cuatro de los últimas cinco Champions. Y la venganza de la Supercopa de Europa, para más inri, se fraguó en el escenario favorito del equipo del ‘noventayramos’, en los últimos minutos y en la prórroga. Y es que en el tiempo añadido el Atlético de Madrid asestó el golpe definitivo para dejar al Real Madrid contra cuerdas en el primer partido oficial de la temporada. Sin Zidane y sin Cristiano Ronaldo, el Cholo Simeone y el conjunto colchonero dan definitivamente la ansiada venganza que durante tantas temporadas han soñado en Europa. La dura espera para la afición rojiblanca, al menos, ha merecido la pena.
El Cholo Simeone ha confeccionado una plantilla campeona capaz de competir contra cualquiera