El Barça, a destronar al Madrid en la final
El Barça dio una lección defensiva durante tres cuartos, donde cimentó una ventaja importante para superar al Baskonia. Ahora el objetivo ya es la Copa
El Barça se clasificó para la final de la Copa del Rey después de superar al Baskonia (77-68) en un partido que tuvo claramente dominado durante tres cuartos, y solo en el último, los de Ivanovic trataron de acercarse, aunque sin suerte. Un gran partido del Barça, especialmente en defensa, y control total del rebote (44-27) que `ahogó' a los vitorianos durante tres cuartos, y cuando amenazó Baskonia, el Barça no perdió la compostura para asegurar el triunfo y el billete para la final donde le espera hoy el Madrid.
Si alguien pensaba que la prórroga de la noche anterior ante Unicaja iba a afectar al Barça, se equivocaba. Jasikevicius planteó el partido ante el TD Systems Baskonia como una guerra de guerrillas. Lo importante era `cortocircuitar' al contrario a base de defensa intensa, sin dejar pensar al rival.
Y el Barça lo consiguió claramente en los primeros dos cuartos. Una defensa asfixiante de los azulgrana de la que solo se escurría Henry, el único capaz de anotar por los vitorianos, mientras el Barça se repartía los puntos, en un marcador bajísimo (15-12). Con la defensa bien asentada y el control del rebote (26-13), empezó a carburar el ataque, y especialmente desde larga distancia. Primero
El Barça jugó tres cuartos pletóricos en defensa que le llevó a 20 puntos (67-47) para bajar la guardia al final
Los azulgranas controlaron el rebote (45-27) y maniataron a un Baskonia que reaccionó tarde
fue Abrines (24-17), y dos triples consecutivos de Mirotic, y el Barça empezaba a dominar (32-23). Ivanovic no encontraba respuesta más que en Henry. Dos triples más de Higgins y Hanga al límite del tiempo, permitieron al Barça irse al descanso con un 38-27 que situaba al Barça en claro control del encuentro, marcado por las férreas defensas de ambos equipos. El Barça salió igual de concentrado tras el descanso y en apenas un minuto alcanzó su máxima de 17 puntos (44-27). Una diferencia que el Baskonia trató de recortar (44-34), aunque el cuadro de Jasikevicius se sentía seguro con su defensa y rebote . El Barça maduraba el partido, dominando todas las facetas y llegaba a los 10 minutos finales con 17 puntos de renta (64-47).
La máxima llegó al inicio del último cuarto (67-47) y parecía el partido cerrado. Pero no fue así. El Baskonia empezó a anotar mientras llegaban las imprecisiones azulgranas en ataque. El resultado fue un parcial de 2-16 que metía al Baskonia en el partido (69-63). En esos minutos de duda, Baskonia solo pudo acercarse a cuatro (69-65), pero el Barça mantuvo la compostura y no se dejó llevar por los nervios, para asegurar el triunfo (77-68) y la opción de destronar al Madrid de la Copa, y su propia casa. El clásico de Copa está servido.