El acierto blanco fue decisivo
El Real Madrid jugó un buen partido en el Palau y fue justo vencedor pese a que el Barça estuvo a punto de llevarse la victoria con un triple de Mirotic
El acierto en el triple del Real Madrid (15 de 34) fue clave en el dominio ofensivo del Madrid
Higgins (21) tiró del Barça junto a Calathes (18) y Mirotic (17), pero el Madrid jugó mejor como equipo
A pesar del dominio blanco, el Barça estuvo a punto de ganar tras triple de Mirotic, pero Laprovittola sentenció
El Madrid acabó con la racha de cuatro victorias consecutivas del Barça ante los blancos (85-87) en un final de infarto en el Palau en que decidió Laprovittola, y de paso se aseguró prácticamente la primera plaza de la temporada regular, que le dará ventaja de pista en los play-offs. Los blancos, con un gran acierto en el triple (15 de 34), ante un Barça poco concentrado defensivamente, y muchos balones perdidos (18), siempre fue a remolque de un Madrid, aunque en los últimos 40 segundos a punto estuvo de llevarse una victoria que, todo hay que decirlo, no mereció. Con Pau Gasol en el equipo inicial, los azulgrana tuvieron una mala puesta en escena. Incómodos en ataque con Tavares mandando en la zona, y un Laprovittola que llevaba el ritmo del partido. Un inesperado 0-9 para empezar con un Barça que ya no se recuperó en la primera mitad.
POCO ACIERTO Los tiros exteriores no entraban, y la poca definición ofensiva provocó muchas pérdidas, que el Madrid aprovechaba para jugar a placer con el base argentino al mando (6-15). Jasikevicius movía el banquillo, con Davies, tratando de ganar poder bajo el aro. Pero a los azulgrana les costaba un mundo anotar, mientras el Madrid veía aro con facilidad.
Higgins trataba de coger la batuta ofensiva, pero el partido estaba en manos de los blancos, a pesar de que Tavares se fue al banco con dos faltas (15-20). La defensa azulgrana subió de nivel, con el objetivo de frenar los ataques visitantes.
Smits acortaba la renta a tres al inicio del cuarto (17-20), pero fue lo más cerca que estuvo el Barça. Todos los balones pasaban por el letón, con la intención de forzar al jovencito Vukcevic, uno de los destacados en el duelo. Pero el Madrid iba afianzándose en su juego gracias a los triples del propio Vukcevic, y dos de Rudy Fernández, para alcanzar la máxima blanca (22-36).
En los momentos más titubeantes del Barça, incapaz de producir en ataque y sin poder frenar al Madrid con el mejor Laprovittola (8), fue Kuric el que, gracias a dos triples, devolvió un tanto la confianza al Barça junto a un gran Calathes - el mejor del Barça-, que reducía la renta a 9 al descanso (33-42).
Con Mirotic sin estrenarse en la primera mitad (0 de3), junto a 10 balones perdidos y concediendo al Madrid siete rebotes ofensivos, la diferencia para el conjunto de Pablo Laso aún podía considerarse leve, pensando en la reacción en la segunda mitad.
REACCIÓN Y tras el paso por el vestuario, el Barça salió con más brío, especialmente en defensa, y con un Niko Mirotic que quiso cambiar el signo del partido con sus acciones mucho más agresivas. El montenegrino tomó el protagonismo, con ocho puntos consecutivos para meterse de nuevo en el partido (47-51) y con Tavares en el banco con cuatro faltas, sin que apenas pudiera entrar en acción.
Pero el Madrid, esta vez de la mano
de Rudy Fernández, no dejaba reducir las diferencias (47-53), a pesar de un Calathes que cogió el relevo ofensivo de Mirotic, para meter definitivamente al Barça en el partido (57-59). Los blancos sorprendieron con su gran inicio (8-0) en el cuarto final, y supo mantenerse por delante, llegando a dominar de 9 a 40 segundos del final. El Barça, a la desesperada, logró incluso ponerse por delante con triple de Mirotic a 10 segundos del final (85-84). Pero en la siguiente acción, el Barça no supo cerrar la defensa correctamente, y Laprovittola logró sacar un 2+1, que acabó con el posible `milagro' azulgrana cuando el partido parecía perdido desde hacía bastante. Y a la verdad, no hubiera sido justo el triunfo, pero al menos se luchó hasta el último suspiro.