Madrid, 20 de diciembre de 2021
Querido diario, suerte que tengo a ti. Si no, me sentiría tan solo… Por supuesto que no eres mi único amigo. Soy un hombre popular, siempre lo he sido, y no me ha faltado gente a mi alrededor, personas preparadas para hacerme un favor siempre que sea necesario. Buenos colegas como Joan Laporta, por ejemplo, con el que últimamente siempre puedo contar. El bueno de Jan me recuerda al Pujol de los 90; con la mejor disposición para que las cosas en Madrid funcionen de la mejor manera. El catalanismo que nos gusta. Pero reconozco que solo contigo, diario, puedo ser completamente sincero. Solo con decirte que eres el único diario de España en el que no se habla mal de mí ni del Real... ¡Qué persecución! Necesito un confidente como tú (por escrito, mejor que en audio), y más ahora que estamos en guerra. En guerra contra La Liga. Hubo un tiempo en el que podía llegar a pensar que Tebas había nacido para llevarse bien conmigo: es un romántico, un nostálgico, y encima, madridista declarado. Todo encajaba. Pero el dinero todo lo estropea, amigo mío. Sé de lo que hablo. El dinero solo trae problemas... El dinero de los demás, me refiero. Porque ahora la Liga se ha em-*
peñado Eso llevarlos abusivo sí, teniéndolos en en a los toda que tribunales. el mi resto atados vida de (y Por 50 en equipos años. el eso, amor también ‘Impulso’, ingresen de Dios, sé más lo de no llaman. lo millones había que Mi hablo). visto primer de los un ¿Por ‘impulso’ contrato que qué merecen. cuando sería más ¡Pero yo les si todos ofrecí salíamos mi solución beneficiados! en forma de Los Superliga grandes no jugamos había tanta una unanimidad? competición que genere interés y el resto lo pueden disfrutar por la tele tan ricamente. Winwin. No nos engañemos: ¿a quién le interesa una liga que gane el Atleti? ¿Y qué manía es esa de compartir beneficios, redistribuir la riqueza…? ¿Qué somos? ¿De centroizquierda? A mí eso de repartir solo me convence cuando lo hace Casemiro. Pero, vaya, que la cosa no cuajó. Yo iba de buena fue y mira la que se armó. Aún me pitan los oídos. Con esto de la Superliga, al final, me ha pasado lo mismo que con otros de mis proyectos: se ha formado un buen terremoto.