Una goleada para recuperar la confianza
España tumbó con solvencia a Islandia en Riazor: la diferencia de nivel entre ambos equipos quedó reflejada en el marcador. El bloque de Luis Enrique rescata sus mejores sensaciones en el último amistoso antes del Mundial de Catar
España se dio un festín en La Coruña: cinco goles ante Islandia que refuerzan el `proyecto Luis Enrique'. La selección apenas sufrió -Islandia fue un rival rebajado- y pudo desplegarse en ataque con una interesante variedad de recursos. Firmaron sendos dobletes Morata y Sarabia, excelente noticia para un grupo al que se le ha achacado falta de gol. Fue el último amistoso antes del Mundial -la Nations League se jugará en junio y septiembre- y España salió reforzada, potenciando sus virtudes y minimizando sus carencias.
La selección arrancó enchufada, con tres aproximaciones interesantes -sendos disparos de media distancia de Soler y Koke y un intento de remate demasiado forzado de Morata- pero el partido se empezó a apelmazar pronto.
Alba, primer capitán anoche, fue uno de los encargados de reactivar al equipo con sus internadas por la banda zurda. En una de ellas combinó con Carlos Soler, que estuvo a punto de firmar el primer gol del partido en el minuto 21, con una volea con el exterior del pie derecho, muy estética pero ligeramente desviada al palo izquierdo de Runarsson.
Desatascó el choque Morata: premio a su esfuerzo en el área, siempre bien tapado por los rivales hasta que supo leer a la perfección el movimiento de sus compañeros, con Guillamón filtrando un pase al área y Soler dejándola pasar. Ahí estaba el `7' de España, que recortó con brillantez y remató a gol con tranquilidad.
Tan solo dos minutos después, una internada de Dani Olmo (un jugador fundamental para Luis Enrique, con un compromiso indestructible con el equipo) acabó en penalti. Lo tiró Morata, que no dudó en la ejecución. Igualó a
Morata firmó un doblete que le reivindica como `9' de La Roja; Pino y Sarabia completaron el festival
Laporte y Guillamón no sufrieron en defensa, Koke hizo de `Busi' y Jordi Alba y Olmo rindieron a gran nivel
Aunque Islandia fue un rival menor, la victoria afianza el `proyecto Luis Enrique' a ocho meses del Mundial
Butragueño en la lista histórica de goleadores con La Roja, con 25. El 2-0 a falta de cinco minutos para el descanso despejó el camino de España, que respiró aliviada. El segundo acto arrancó bien, con Alba profundizando por su banda para recoger un pase de Soler. El centro del valenciano lo remató de cabeza Yéremy Pino, un gigante entre los pesados centrales islandeses. El canario remató de escorzo para firmar el tercero del partido, su primero con La Roja.
UNA SEGUNDA PARTE MUY CÓMODA España jugó con comodidad frente a una Islandia menor, que nada tiene que ver con la que impactó en la Eurocopa de 2016. Luis Enrique retocó la banda izquierda al completo para dar entrada a Marcos Alonso en el lateral y Sarabia en el extremo. Ambos exprimieron sus minutos al máximo: solo necesitó un par de minutos el madrileño para firmar el cuarto, precisamente a pase de Alonso, llegando desde segunda línea y rematando de cabeza al primer palo. Idénticos protagonistas firmaron el quinto de España, que jugó toda la segunda parte con una sonrisa. Marcos Alonso, un puñal por la izquierda, asistió a Sarabia, que marcó a placer casi sobre la línea de gol.
Completó España un partido que respondió a las necesidades del equipo: se necesitaban goles, estabilidad defensiva y una reivindicación sin fisuras del juego combinativo. La última prueba antes del Mundial fue esperanzadora.