Croacia obtiene su revancha particular
El cuadro ajedrezado firmó las tablas ante una Francia que bajó los brazos en el tramo final del partido
Croacia y Francia firmaron un empate que, a pesar de no satisfacer los intereses de ninguno de los conjuntos de cara a la Nations League, supuso una pequeña victoria moral para los locales. El cuadro ajedrezado saboreó su revancha parcial tras la derrota en la final del Mundial de 2018. No solo por el empate, sino porque fueron capaces de arrinconar al cuadro galo en los últimos minutos. El partido se fue al descanso con las espadas en todo lo alto, pero la balanza no tardó en inclinarse a favor de Francia. Ben Yedder derribó la muralla croata con un pase milimétrico que encontró a Rabiot. Al centrocampista de la Juventus no le tembló el pulso ante
Livakovic, al que batió con un potente disparo por el palo corto. Croacia, muy activa en el primer acto, se diluyó cuando recibió el primer tanto. Tan solo Modric, con un disparo desde la frontal del área, consiguió inquietar mínimamente a Maignan. A pesar de no estar generando peligro, Kramaric fue capaz de forzar un penalti tras ser derribado por el recién ingresado
Clauss. El propio Kramaric fue el encargado de transformar la pena máxima mediante un disparo raso. El gol del empate espoleó a los locales, que se volcaron en ataque para conseguir la ansiada revancha. Vlasic estuvo a punto de romper las tablas, pero Maignan volvió a hacerse gigante para frustrar la acción. En el último suspiro, Sucic pudo convertirse en héroe nacional, pero su intento se perdió por la línea de cal.
Francia golpeó primero por mediación de Rabiot, pero Kramaric empató en el último tramo
Sucic pudo convertirse en héroe nacional, pero su intento se perdió por la línea de cal