Luis Enrique, el conseguidor
El seleccionador ha demostrado que su proyecto funciona: ha situado a España de nuevo entre las mejores y ha ido cumpliendo todos los objetivos
Desde que asumió el cargo hace casi dos años, el equipo ha crecido para volver a estar entre los mejores
Ha combinado veteranos y jóvenes para dar forma a un bloque muy sólido de futbolistas
Luis Enrique asumió el cargo de seleccionador inmediatamente después del Mundial de 2018, cuando aún se vivían las secuelas de la abrupta salida de Julen Lopetegui. Desde el primer día tuvo que hacer frente a críticas -que en muchas ocasiones tenían que ver más con su peculiar relación con la prensa que con motivos puramente futbolísticos- pero sin embargo, ha ido conquistando todos los objetivos que se le habían marcado desde la RFEF. El primero era que España volviese a ser un equipo competitivo y puntero: no lo había sido ni en el Mundial 2014 ni en la Eurocopa 2016. Tampoco en Rusia 2018, con Hierro como seleccionador improvisado. Su primera misión fue recuperar el ánimo y el juego de una selección a la baja.
Han pasado casi cuatro años desde entonces y España vuelve a verse entre las mejores: si no candidata, al menos aspirante, como suele subrayar Luis Enrique. Motivos no le faltan, porque vista en perspectiva, la trayectoria reciente de la selección la convierte en uno de los equipos más interesantes del momento. Contra pronóstico, Luis Enrique colocó a España entre las mejores de Europa: la selección fue semifinalista de la Eurocopa y estuvo a un paso de jugar la final. Apenas tres meses después, España se metió en la final de la Nations League, que perdió ante Francia en una jugada muy discutible.
El siguiente reto era clasificar a España para el Mundial: el grupo era teóricamente asequible, pero una derrota en Suecia complicó las cosas y hubo que ganar a los suecos en la jornada decisiva. España ganó y Luis Enrique pudo colgarse otra medalla: España estaría en el Mundial, a pesar de que muchos ya la daban por condenada a la repesca.
De vuelta a la Nations, España cierra la temporada como líder de su grupo, compartido con una selección tan potente como la portuguesa, y con muchas opciones de clasificarse para la final a cuatro del torneo. Sería la primera selección en repetir presencia en la final. Inglaterra, Países Bajos, Portugal y Suiza jugaron la primera; España, Italia, Francia y Bélgica fueron las protagonistas de la segunda.
España deberá sellar su condición de líder de grupo en septiembre: después ya asomará el Mundial, el gran termómetro para medir a la España de Luis Enrique, un seleccionador que de momento ha logrado lo que se ha propuesto.