Una temporada discreta en Turquía
▄ Miralem Pjanic tuvo un buen arranque en el Besiktas, hasta el punto de que el conjunto turco se planteó quedarse al centrocampista bosnio en propiedad. Pjanic celebró hasta un título, la Supercopa, tras derrotar al Antalyaspor en la tanda de penaltis. Pero en la segunda fase de la temporada las lesiones lastraron su rendimiento. El centrocampista bosnio se perdió hasta once partidos por distintas dolencias a lo largo de la temporada, perdiendo regularidad y protagonismo en el equipo. Pjanic disputó un total de 26 partidos en los que sirvió cuatro asistencias, unas cifras insuficientes para que el Besiktas hiciera el esfuerzo de negociar con el Barça su traspaso.