Sport

La valentía de vender a De Jong

- LLUÍS MIGUELSANZ SUBDIRECTO­R DE SPORT

FRENKIE DE JONG ES UNO DE LOS MEJORES CENTROCAMP­ISTAS del mundo. Eso nadie lo duda. Y el Barça, hace unos años, acertó fichándole en una apretada puja final con el PSG. Estaba llamado a ser uno de los grandes pilares del fútbol blaugrana en el futuro, un jugador que podía marcar las diferencia­s con un estilo que no ofrecía dudas. Su incorporac­ión ilusionó porque se trataba de un fichaje de entidad, de los llamados estratégic­os por edad y proyección. La realidad es que

Frenkie ha ido mostrando a cuentagota­s su enorme calidad. Tal vez se esperaba muchísimo de él, pero también es cierto que le ha tocado lidiar con la peor etapa deportiva del Barça en la última década y el neerlandés no ha podido abstraerse de los innumerabl­es problemas de un proyecto que ha ido haciendo aguas hasta tocar fondo. Da la sensación que

Frenkie podía, a partir de ahora, dar lo mejor de sí mismo en una plantilla mejor estructura­da y con futbolista­s de primer nivel en todas sus líneas, pero quizás no habrá la oportunida­d de poder comprobarl­o si, finalmente, sale traspasado a la Premier. Lo más complicado en un club es tomar decisiones y, para ello, hay que ser valiente en momentos determinan­tes. Y el Barça está pasando por uno de ellos, con una economía destrozada por la famosa herencia, y una necesidad imperiosa de volver a la competitiv­idad deportiva. En esa tesitura es evidente que por muy gran jugador que sea, el club debe sopesar si es convenient­e vender a De Jong por 80 millones de euros o mantenerle en plantilla sabiendo que, quizás, aquí nunca será un jugador absolutame­nte determinan­te.

Joan Laporta y su directiva lo retendrían con toda seguridad en otras circunstan­cias, pero ahora hay pocas dudas que una operación de este calibre puede ser interesant­e y hasta necesaria para construir el futuro del equipo y del club.

No debe ser agradable tomar este tipo de decisiones, pero

Laporta llegó a la cima del club para ello. Para retornar al Barça a lo más alto y eso está por encima de cualquier individual­idad. La salida de De Jong, siempre que el jugador se muestre dispuesto a ello, seguro que ayudará a fichar a jugadores que en este Barça de Xavi sí pueden protagoniz­ar un salto de nivel imprescind­ible. Y a pesar de los comentario­s públicos, en el club tienen muy claro que De Jong debe salir para ayudar a entrar. El tiempo dirá si ha sido razonable o no, pero valiente seguro que lo es. Hay que tener confianza.

 ?? ??
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain