Nico y Pjanic, en manos de Bernardo
Xavi Hernández está contando con ambos en la pretemporada, pero difícilmente tendrán sitio si se queda Frenkie de Jong y no ficha el portugués
La confección de la plantilla del FC Barcelona 2022-23 sigue su curso. Pero aún quedan varios interrogantes. Sobre todo en el centro del campo. Con la incógnita todavía de si sale o no Frenkie de Jong (el club le ha trasladado que o se rebaja notablemente la ficha o tienen que venderlo porque desborda la masa salarial) y de si llega Bernardo Silva, todo está bastante abierto. De hecho, en caso de que acabe aterrizando el portugués y Frenkie termine no saliendo traspasado, Miralem Pjanic y Nico González no tendrían hueco.
XAVI, SATISFECHO CON PJANIC El bosnio está cuajando una buena pretemporada y Xavi está contento con él. El de Terrassa cree que puede ser útil. Eso sí, para seguir debería ajustarse la ficha. Su continuidad será especialmente interesante si no termina fichando el jugador del City.
Ronald Koeman apenas le dio oportunidades a Pjanic, pero el futbolista, de 32 años de edad, tiene una buena trayectoria deportiva a sus espaldas y confía en acabar de convencer al entrenador.
NICO, UN CASO SIMILAR Con el gallego ocurre una situación similar. Xavi cuenta con Nico y lo cierto es que ha ido siendo bastante protagonista en pretemporada.
Pero con De Jong y Bernardo difícilmente tendría espacio en un centro del campo ahora mismo muy poblado, pero que está muy definido en la titularidad con Sergio Busquets en el pivote, y Pedri y Gavi en los interiores, el mismo que alineó ayer el técnico de Terrassa en el Joan Gamper. El club no dispondría de tantos dorsales. El gallego, sobre todo a su edad, necesita jugar y si en el cuadro azulgrana se le cerraran bastante las puertas, debería hacerlo como cedido en otro lugar. Todo está supeditado a lo que ocurra con Frenkie y con Bernardo Silva. El portugués jugó ayer solo 12 minutos -sustituyó a Gündogan en el 78'- en la victoria por 0-2 del City en el feudo del West Ham.
El jugador luso solo jugó doce minutos en el primer partido liguero del Manchester City