El primer cuarto marcó la diferencia
El Real Madrid sumó ayer una nueva victoria en la Euroliga en La Fonteta (73-80) al exprimir su inspiración en el primer cuarto ante un Valencia Basket que volvió a firmar un arranque sin dureza defensiva. El equipo valenciano mejoró con el paso de los minutos y forzó un final igualado en el que el bosnio Dzanan Musa y el argentino Gabriel Deck sostuvieron con frialdad y calidad al conjunto madrileño.
Arrancó el encuentro con el Madrid intenso y, sobre todo, inspirado. Primero Musa y luego Cornelie, que sumaron 20 de los primeros 24 puntos visitantes. Con ese panorama, a los locales les costó el paso de su rival (16-27, m.9) para llegar al descanso con 10 puntos para los visitantes (31-41).
En la reanudación, el paso por los vestuarios mejoró la defensa local y también su puntería (43-59). El Valencia subió el nivel físico. Mucho más incómodo, el Madrid sobrevivió gracias a las acciones de Gabriel Deck y Fabien Causeur, pero un triple de Van Rossom alimentó el sueño local (61-68, m.37). Pero Deck y Musa sostuvieron a los de Mateo que ya no sufrieron para cerrar un triunfo que cimentaron desde el primer cuarto.