Gran ambiente con `roscones'
Acciones tan sencillas y tan desenfadadas como esta añaden colorido y motivan a los aficionados
Apenas un día después del día más feliz y más ilusionante para la infancia, el Barça quiso prolongar las fiestas navideñas con una jornada muy especial en la que el tradicional `Roscón de Reyes' jugó un papel protagonista.
Y todo ello en medio de un gran ambiente en los estertores de unas largas vacaciones para los escolares y en la noche del sábado en un horario ideal para que las familias disfrutasen con el baloncesto, nada que ver con los duelos nocturno de Euroliga por las noches entre semana.
Tal y como se había anunciado oportunamente en la previa, los primeros 500 espectadores que hicieron acto de presencia en el Palau recibieron una porción de uno de los 10 `Roscones de Reyes' que había dispuesto el club. En cada uno de ellos había un pequeño reyecito y los 10 que lo encontraron no recibieron una coronita como es tradicional, sino una sudadera especial con la inscripción `Som i Serem'. Eso sí, esta vez no hubo `damnificados', ya que aquellos que se llevaron el haba no tuvieron que pagar nada. Este ambiente distendido llega en una temporada en la que el Palau está recuperando la alegría con las mejores entradas de los últimos años. Por fin se ha recuperado la ilusión y las ganas, algo que quebró con extrema crueldad la pandemia del coronavirus. Fue una manera desenfadada y divertida de colorear la hora previa al tercer duelo de un disparatado mes de enero en el que aún esperan nueve encuentros más.
Los 500 primeros se comieron un trozo de Roscón de Reyes y diez se llevaron el ‘rey’ y una sudadera