Luis Enrique pidió vigilar la vida nocturna del PSG
El técnico asturiano contrató a una persona para investigar a sus futbolistas y comprobar que cumplían con las normas disciplinarias del equipo
El orden disciplinario es una de las marcas de la casa de Luis Enrique. El técnico asturiano siempre se ha caracterizado por mantener una fuerte disciplina en todos los vestuarios que ha dirigido, ligando rendimiento con el cumplimiento de las normas pensadas por su staff técnico. Pese a ello, siempre ha sido señalado como uno de los técnicos más queridos por los futbolistas que ha ido entrenando. Tal y como informó ayer el diario de referencia de la prensa deportiva en Francia, ‘L’Équipe’, el técnico obligó a todos los futbolistas del PSG a firmar al entrar en la ciudad deportiva de Poissy. De la misma forma, debían cumplir con los horarios establecidos por el staff para los entrenamientos y las situaciones extradeportivas que los integrantes del cuerpo técnico, liderado siempre por Lucho, consideraran oportunas.
Desde que asumió el cargo y se iniciaron los entrenamientos, según la información de ‘L’Équipe’, el asturiano decidió delegar en una persona la tarea de vigilar las discotecas de referencia de París para controlar si alguno de sus futbolistas salía de fiesta. También se encargaba de controlar las redes sociales de los futbolistas, para evitar distracciones que influyan en su rendimiento sobre el verde. Luis Enrique considera primordial que el jugador se cuide y esté disponible en todo momento, y es
LAS NORMAS DISCIPLINARIAS SON UNA DE LAS BASES DE TODOS LOS EQUIPOS DEL EXENTRENADOR DEL BARCELONA
consciente de que salir de fiesta de forma continuada no permite estar en la mejor forma posible. El preparado gijonés, con todo, siempre es un fiel defensor de sus jugadores, a los que nunca señala en público, defendiendo siempre el interés del colectivo por encima de los particulares.
TENSIÓN CON MBAPPÉ En lo deportivo, el PSG sufrió para lograr el pase a los octavos de final de la Champions con un empate (1-1) en el campo del Dortmund. En los minutos finales, Luis Enrique ordenó al equipo bajar el ritmo de sus jugadores para aguantar el resultado, algo que no gustó nada a Mbappé, que no paró de pedir el balón. Según las imágenes captadas al final del encuentro, el capitán de la selección francesa estaba muy enfadado, jaleando los brazos como ‘reprimenda’ al equipo. En uno de esos momentos, se cruzó con Luis Enrique, con el que cruzó dos palabras y le miró con gesto contrariado.