El Dakar se endurece en Arabia
Fiel a su cita anual, aunque algo más tarde de lo habitual, este viernes 5 de enero arranca una nueva edición del Rally Dakar. Carlos Sainz aspira a ser el gran protagonista en la previsible despedida de Audi
Un prólogo de 28 kilómetros abrirá las hostilidades en la 46ª edición del Rally Dakar, que arranca este viernes 5 de enero. Por quinto año consecutivo la carrera discurrirá íntegramente en territorio de Arabia Saudí. Por delante, 7.891 kilómetros (4.727 cronometrados) y muchas incógnitas que se irán despejando a lo largo de las doce etapas, con desenlace el 19 de enero.
MÁS DIFILCIL Este año la caravana seguirá un rumbo diferente a las precedentes ediciones en el desierto saudí y tendrá escenarios de salida y final inéditos en Al-Ula y Yanbu, respectivamente. El recorrido irá del noroeste hacia el sureste del país y a la inversa, con parada en la capital, Riyadh, en el ecuador del rally. Las etapas en la zona norte ofrecerán tendrán un trazado más variado, alternando arena y dunas con terreno pedregoso, mientras que en la parte sur cobrará protagonismo el desierto más inhóspito del planeta, el llamado Empty Quarter. Aquí se desarrollará la etapa maratón de 48 horas y 766 km que pondrá a prueba la resistencia de pilotos y máquinas.
Los días 11 y 12 de enero abordarán el mayor desierto de la península Arábiga en dos jornadas, con unas pocas provisiones al estilo militar y una tienda de campaña para descansar, sin ningún tipo de asistencia. “La organización nos obligará a salir de su zona de confort y podremos ver grandes diferencias”, anticipa Nani Roma, el único piloto español que puede presumir de haber ganado el Dakar en coches y motos y que este año regresa a la competición con Ford, tras un año de ausencia, después de librar una batalla contra el cáncer.
FAVORITOS Nasser Al-Attiyah , dominador indiscutible del Dakar los últimos años con Toyota y poseedor cinco trofeos Touareg, volverá a ser el rival a batir, a pesar de que afronta un año de transición con el Hunter de Prodrive, a la espera del desembarco de Dacia en 2025. El qatarí, que compartirá equipo con el que fue su rival en la pasada edición, Sébastien Loeb, descarta de entrada a la ‘armada’ de Audi que encabezan Carlos Sainz y Stephane Peterhansel. “Les doy tres días y a casa”, suelta. Sainz , que a sus 61 años persigue el sueño de ganar su cuarto Dakar con el innovador prototipo RS Q etron, impulsado por energía eléctrica, defiende las posibilidades de Audi en el que probablemente sea el último intento del constructor alemán antes de volcarse en su proyecto de Fórmula 1. “Puede ser un coche ganador, pero no niego que es difícil. Con cuatro motores, software, sensores... hay muchas cosas que no pueden ir bien en algún momento. Veremos”, advierte, prudente. “Como mínimo queremos estar en el podio”, añade el francés Peterhansel, ‘monsieur Dakar’, el piloto más laureado del Dakar, con 14 Touareg en sus vitrinas. La representación española en las cuatro ruedas es de las más amplias y no habrá que perder de vista a Armand Monleón, copiloto de Lucas Moraes, y Dani Oliveras, copiloto de Yacopini, ambos en Toyota. También Isidre Esteve aspira al ‘Top 20’ con su Hilux T1+, mientras Laia Sanz (Astara) y Pau Navarro (Mini) pueden dar alguna sorpres y Cristina Gutiérrez y Gerard Farrés intentarán ganar sus respectivas categorías (T3 y T4). En motos, Joan Barreda, el español con más victorias de etapa (29), ha tenido que ‘buscarse la vida’ tras su salida de la estructura de Honda y afronta una nueva etapa en Hero. Reconoce que la moto india “es diferente”, pero se siente bien sin presión: “Me gustaría luchar por el top cinco y tengo confianza”, certifica. Su puesto en Honda lo ha ocupado el valenciano Tosha Schareina, piloto revelación en el Mundial, que afronta su tercer Dakar con convicción: “Tengo una gran oportunidad y quiero aprovecharla. Mentiría si dijera que no pelearé por la victoria final”. La carrera está muy abierta, con una decena de aspirantes al triunfo y el defensor del título, Kevin Benavides, llega tocado tras pasar por el quirófano hace un mes por una fractura de peroné