El Barça ‘pinchó’ solo cuando podía permitírselo
Las azulgranas, que a pesar de acabar con el pleno siguen invictas en todas las competiciones, lograron un empate a cuatro sobre la bocina ante un gran Benfica que mostró su mejor versión en su mejor momento
Si algún día tenía que ‘pinchar’ el Barça, este era el mejor contexto para hacerlo. La clasificación en el bolsillo y la primera plaza asegurada, más allá de la voluntad del equipo y el cuerpo técnico de alargar el pleno de victorias. Aunque el duelo ante el Benfica, que acabó con un empate ‘in extremis’, fue un espectáculo para los aficionados e hizo olvidar que no había nada en juego para ninguno de los dos equipos.
Lo avisó Jonatan Giráldez en la rueda de prensa previa. “Es un equipo que ya nos exigió mucho allí el año pasado y que nos volvió a poner las cosas difíciles aquí en casa hace unos meses”. Y no se equivocaba. Valiente, arriesgado y con personalidad e idas claras salió el Benfica, que iba a por todas sabiendo que si quiere llegar lejos en esta competición tiene que ganar a las mejores. Arrancó dominando el Barça y la efectividad azulgrana estuvo de suerte. Dos goles en veinte minutos. El primero, de Graham, tras un centro con música de Bronze. Y acto seguido la noruega fue la asistente y Patri Guijarro remató libre de marca para hacer el segundo.
Reaccionaron las portuguesas, acompañadas de una afición que había agotado las entradas el día antes, con tantas camisetas rojas como azulgranas, casi, eso sí. Con un primer tanto -que no debió subir al marcador por fuera de juegoavisó Alidou del hambre de su equipo para recortar distancias. Y poco después hizo ella misma el segundo, con asistencia de Falcón, por un grave error defensivo del Barça que permitió que rematase sola- para poner el empate al filo del descanso y dar vida a las suyas. Había logrado el conjunto azulgrana llegar a la cita con pleno de victorias y no iba a rendirse, pero se encontró con un Benfica ilusionado y esperanzado que vio como Graham volvía a marcar para el Barça. Otro centro lateral, esta vez de Mariona, que acababa con gol de la noruega.
Instantes después, y cuando mejor estaba el Barça, precisamente, Jessica Silva dio la sorpresa en Seixal, con un gol a pase de Nycole tras una jugada ‘delicatessen’. Fue el momento en el que empezó a desinflarse el cuadro azulgrana y a crecerse el Benfica.
Aitana tuvo dos ocasiones para adelantarse de nuevo y no encontró fortuna. Y en una de esas llegó el cuarto de las de Filipa Patao, en una jugada desafortunada. Un mal rechace de Gemma que acabó rematando en propia Bronze.
REMONTADA Remó el Barça con todo en contra en los minutos finales y a punto estuvo de hacer el empate en varias ocasiones. Pina, Ari Arias, Mariona y Brugts se quedaron con la miel en los labios. Apareció Bronze al rescate, como una manera de compensar su error en el cuarto gol del Benfica. Un remate ‘in extremis’, marca de la casa, para rascar un punto en Lisboa. Un partido que sirvió como toque de atención y para aprender más que para olvidar.
GRAHAM, CON DOBLETE, Y PATRI ENCARRILARON LA VICTORIA Y BRONZE ACABÓ SALVANDO EL EMPATE ‘IN EXTREMIS’
MÁS ALLÁ DEL RESULTADO, ESTE PARTIDO SIRVE COMO TOQUE DE ATENCIÓN Y PARA APRENDER MÁS QUE PARA OLVIDAR