No siempre ha ganado la cartera
Todos los caminos apuntan al fichaje de Mbappé por el Real Madrid este verano. Una pesadilla para los culés. El jugador más diferencial de los últimos años reforzará al eterno rival del Barcelona si nada sorprendente lo remedia. Nada importaron los feos anteriores o desprecios del delantero francés para con el Madrid. Ahora comentan que va al redil e incluso acatando todas las condiciones de los blancos. La memoria es flaca cuando nos conviene.
Ante esta difícil tesitura o este desalentador panorama para el Barcelona, ¿que habrían hecho Johan Cruyff o el mismísimo Pep Guardiola? Seguro que no se pondrían nerviosos. A buen seguro que rápidamente lanzarían un rotundo y claro mensaje de apuesta total por la cantera del club. Reafirmar la creencia por la gente joven del plantel y arroparles con algunos jugadores que no tienes en casa y que te marquen diferencias. Ante los problemas, imaginación. Estamos viviendo la época más delicada del barcelonismo en décadas y con una situación económica que no parece que pueda ayudar a revertir rápidamente, a golpe de talonario la situación deportiva.
Difícil ilusionar a la afición. Difícil enganchar a los aficionados y generarles expectativas de que algo bueno está por llegar. Son tiempos de calma. De reflexión. De análisis y de paciencia y comprensión. El panorama cercano no invita al optimismo. El futuro cercano parece envuelto en negros nubarrones. Las perspectivas de regeneración no parecen fáciles. Y para colmo, en la acera de enfrente aparece en el escaparate el jugador más diferencial. Depresión total o imaginación. Hundirse o luchar.
No será fácil en los próximos tiempos que el actual Barcelona le compita al Madrid como lo ha venido haciendo históricamente, seamos realistas, pero el mejor ejemplo lo hemos visto esta temporada con el Girona. Con uno de los presupuestos más bajos de la categoría ha sido capaz de luchar de tú a tú con los grandes del fútbol español. No solo el dinero garantiza el éxito, aunque es verdad que ayuda y mucho. Pero tenemos ejemplos de equipos millonarios que no supieron rentabilizar las inversiones. Sin ir más lejos el PSG, el Chelsea durante años, o casi eternamente el Manchester United, así que calma.
Incluso en el hipotético caso de quedar con la temporada en blanco, sin títulos, como puede ser esta, será mejor hacerlo invirtiendo y apostando por la gente joven de casa, arriesgando con el plantel a invertir en jugadores que, o no mejoran mucho lo que hay o no te garantizan un mayor éxito. Si hay que vivir una travesía en el desierto mejor con los tuyos y crecer juntos. No hay mal que cien años dure… ni cuerpo que lo aguante.
El Girona es un ejemplo de que no solo el dinero garantiza el éxito, aunque es verdad que ayuda y mucho