Macrooperación policial en Montjuïc
El operativo concentrará a más de 250 efectivos de Mossos d’Esquadra en la previa y durante el partido ante el PSG
El PSG-Barça estuvo marcado durante la previa por la amenaza procedente del terrorismo yihadista, que apuntó como objetivos los cuatro partidos de ida de los cuartos de final de la Champions. El encuentro de vuelta en Montjuïc, pese a que no ha habido más amenazas, sigue siendo un acontecimiento deportivo de primer orden que, por el volumen de personas que mueve, necesita de un operativo policial especial. Mossos d’Esquadra ha liderado la organización de un despliegue de seguridad muy importante con el objetivo de garantizar el buen desarrolllo de esta eliminatoria. Lo ha hecho de forma coordinada con la ‘Police Nationale’ de Francia, la Guardia
Urbana y el propio Barça. Y es que se calcula, más allá de la amenaza terrorista, que 50.000 personas acudan al Estadi Olímpic. De esa cifra, más de 2.600 seran aficionados del PSG y, entre ellos, está prevista la llegada de unos 400 radicales. Por esa razón, la Policía catalana ha dividido el dispositivo en dos grandes áreas: el vinculado a la amenaza terrorista y el vinculado a los grupos radicales.
GRUPOS RADICALES Está previsto que más de 350 efectivos “en su fase máxima”, apuntan desde Mossos (llegada de la afición al campo y la celebración del partido) estén activos para garantizar la seguridad. Se trata de agentes de Orden Público, Unidad Canina y Subsuelo, Seguridad Ciudadana (Grupo Regional de Motos y Grupo de Delincuencia Urbana),
Información y Grupos de Intervención Especial. Todo el operativo, además, estará acompañado de la vigilancia mediante drones y helicópteros desde el aire. En lo que se refiere al control de los grupos radicales, los seguidores ultra del PSG serán vigilados desde que lleguen a Barcelona. De hecho, se les acompañará hasta el recinto de Montjuïc para garantizar que no haya incidencias.
Según apuntan desde Mossos, el nivel de amenaza terrrorista “continúa siendo 4 reforzado sobre 5”, lo que obliga a mantener un nivel de despliegue alto de las medidas de seguridad. Es por ello que se acentuarán la prevención de riesgo, algo que no solo ocurre con un partido de estas características, sino también en otros acontecimientos con gran presencia de personas.