“Mi reto ahora es mantenerme activo”
La esclerosis no ha podido parar a Rafael Ricote, un ingeniero de telecomunicaciones de Villalba que incluso se ha atrevido con La Ruta Transpirenaica en bicicleta de montaña, un extraordinario recorrido de casi 800 km entre el Mediterráneo y el Cantábrico, por la vertiente sur de los Pirineos. Él mismo nos cuenta su historia: "El día que cumplí 40 años, en 2006, me diagnosticaron esclerosis múltiple. ¡Pasé toda la noche en urgencias! Llevaba tiempo notando falta de sensibilidad en la mano izquierda". "Siempre me ha gustado hacer deporte, lo mío es la montaña. Lo que pasa es que la falta de sensibilidad se fue extendiendo a todo el cuerpo, llegó un punto en que no podía salir, incluso tenía problemas para andar, así que empecé a montar en bici". "De chaval había hecho trial, pero ya no montaba y tenía una bici solo porque me la había comprado para recuperarme de una lesión de tendón de Aquiles. Empecé porque no me quedó más remedio, pero me entusiasmé enseguida". "Lo que más me cuesta sobre la bici es el equilibrio y el manejo, al bajar tengo que tener mucho cuidado porque empiezo a tropezar. Si me ves por detrás, parezco un borracho. Por eso no me atrevo con la bici de carretera, por los coches". "Siempre salía solo con la bici, pero en 2015 unos conocidos del trabajo me propusieron hacer con ellos la Transpirenaica. Aceptar fue una gran decisión en lo deportivo y lo personal. La hicimos en tres tramos, en nuestras vacaciones entre 2015 y 2017". "Este año queríamos hacer la Transalpina, pero no nos ha dado el presupuesto, así que haremos una ruta de 5 etapas en Otero de Guardo, Palencia. Y también 2 etapas de la Ruta del Escalofrío". "Procuro hacer todos los deportes: andar, tenis de mesa, yoga… y los fines de semana, rutas senderistas y bicis. Mi reto ahora es mantenerme activo mucho tiempo".