¿SABÍAS QUE?
LA RECOMENDACIÓN DE BEBER
dos litros al día es demasiado general. Nuestras necesidades son muy variables en función del tamaño, composición, temperatura, actividad, consumo de fármacos, etc. Es mejor orientación comprobar que en todo momento tu orina sea clara. A primera hora de la mañana eso resulta más difícil, por eso se recomienda empezar el día con un buen vaso de agua.
UN TRUCO PARA REALIZAR UNA
rehidratación completa tras tus entrenamientos consiste en pesarte antes y después de entrenar. El peso que has bajado corresponde fundamentalmente a los líquidos perdidos y has de reponerlos al menos en la misma cantidad.
NO HAY QUE OBSESIONARSE. UNOS
no llegan, y otros se pasan. Beber abundante líquido contribuye a cuidar la salud y moderar el apetito, pero existe un trastorno alimentario conocido como potomanía. Quienes lo padecen sienten un deseo irrefrenable de beber grandes cantidades de agua.
TODOS LOS EXTREMOS SON
malos. Cuando bebemos agua en exceso, y especialmente si realizamos deporte intenso, con calor y prolongado (se produce una gran pérdida de electrolitos) puede llegar a producirse una hiponatremia, unos niveles anormalmente bajos de sodio en sangre (queda diluido). Se trata de una afección grave, que puede llegar a causar la muerte, porque el sodio regula la cantidad de agua que hay en las células y alrededor de ellas. Este problema se previene tomando durante los entrenamientos prolongados una buena bebida deportiva que reponga nuestros electrolitos… y con sentido común, no bebiendo más allá de nuestras necesidades razonables.
TIENES AGUA POTABLE MUY A
mano. Es posible beber agua del grifo en todo el territorio español, es decir, se trata de agua potable. No obstante, en unas zonas el sabor es mejor que en otras.
UNA HIDRATACIÓN INADECUADA
aumenta un 60% las posibilidades de accidente cuando conducimos.