54 MEJORA CON JESSICA VALL
Es la articulación con más movilidad y sin duda la más importante en el nadador ya que la propulsión, excepto en la braza, se produce mayoritariamente con los brazos, por eso se lesiona con relativa facilidad. Te damos cuatro claves para evitarlo.
También se puede mejorar nadando sin meterte en la piscina
En los nadadores encontramos muchos casos de hipermovilidad articular, personas que tienen una flexibilidad natural más alta de lo normal, suelen tener además la fuerza de rotación interna reducida y un bajo tono de la musculatura subescapular. Estos nadadores en general tienen menos fuerza en todos los grados de rotación del hombro. Los ejercicios que proponemos en este artículo son interesantes para los que tienen la movilidad acentuada y también son beneficiosos para el resto, con la sencilla adaptación en el caso de los que tienen menor movilidad de intentar hacer las rotaciones lo más cerca posible de la máxima amplitud de movimiento.
Con estos ejercicios mejorarás la retracción del hombro (el movimiento de los omóplatos hacia la columna, que lleva el hombro atrás), además de la rotación interna y la externa. Para evitar desequilibrios es importante dirigirse a los músculos tanto de la parte anterior como de la posterior del hombro. No solo evitarás lesiones sino que además mejorarás la mecánica de la brazada y serás más efectivo.